El Ayuntamiento de la Vilavella responsabiliza a la Generalitat valenciana del retraso en las obras de reforma del CEIP José Alba, financiadas a través del plan Edificant, al asegurar que no han avanzado lo que correspondería porque la Conselleria de Educación le debe a la empresa constructora 500.000 euros en facturas.

En esos términos se expresó la concejala de Educación, Inma Traver, al hacer pública la exigencia de celeridad que el equipo de gobierno ha trasladado al Consell, dado que «por desgracia, las reformas se paralizaron a causa de los impagos», afirmó. Según la información facilitada por el consistorio, en la actualidad la Generalitat debería medio millón de euros.

Frente al malestar municipal que estos hechos están generando, Traver agradeció a la dirección del centro «el esfuerzo para paliar los efectos». La edila especificó que «estamos trabajando codo con codo para iniciar el curso y también para estudiar la posibilidad de implantar la jornada continua».

VISIÓN CONFRONTADA

La versión de este problema que ofrece la Conselleria de Educación es algo distinta. Desde el área que dirige Vicent Marzà afirman que «el pago a la empresa constructora se realiza conforme el Ayuntamiento va certificando que se ha realizado la obra y registra las correspondientes facturas en la plataforma Edificant». En relación a los 500.000 euros a los que hace mención la concejala, desde Educación explican que «hace referencia a dos facturas de más o menos la misma cantidad que ya están tramitándose». Y en cuanto al supuesto retraso en el pago que denuncian, aseguran que «la primera de ellas, aunque lleva fecha del 7 de agosto, no fue registrada por el consistorio en la plataforma hasta el 17 de agosto», por lo que no habría transcurrido un mes, «y por tanto estamos dentro de los plazos normales para el pago de la Administración». En cuanto a la segunda, «lleva fecha del 9 de septiembre y fue registrada por el Ayuntamiento el 11 de septiembre», hace apenas una semana.

El proyecto que está ejecutándose en la Vilavella es importante. La inversión ronda los 1,3 millones de euros. Contempla la construcción de un gimnasio, la reforma de los baños, sustitución de ventanas y persianas, renovación del asfaltado, de la verja perimetral y el cableado eléctrico.

En un colegio en obras, con todo lo que ello supone para la organización del curso en plena pandemia, el Ayuntamiento destacó los trabajos de limpieza y desinfección de las aulas, la distribución de mascarillas reutilizables entre los alumnos y el refuerzo de los equipos de limpieza. La intención municipal es contratar enfermeras escolares a través del plan de empleo Avalem Joves.