Vinaròs someterá la ubicación de la piscina municipal a consulta popular. El emplazamiento de esta insfraestructura, que cuenta con dos opciones, la ciudad deportiva y la avenida Leopoldo Querol, se ha convertido en el asunto político más debatido en los últimos meses. Tanto, que la decisión final podría supeditarse a lo que opinen lo vecinos.

La polémica sobre este tema centró buena parte del pleno ordinario, con sendas mociones, una del PVI y otra del tripartito formado por TSV, PSPV-PSOE y Compromís. La primera fue rechazada por el equipo de gobierno, que hizo valer su mayoría.

en ESTUDIO / La segunda, aprobada a pesar de los votos en contra del PP y PVI (el concejal de Acord Ciutadà no estaba presente), incluye un primer punto en el que se acordaba que el pleno se pronunciará sobre la ubicación después de que se hayan estudiado todos los informes al respecto, en especial, el que analiza la sostenibilidad económica de la instalación en una u otra zona.

En segundo lugar, se celebrará una mesa redonda con partidos, clubs y entidades y en caso de no lograr una postura los más unitaria posible, se convocará un sondeo entre la ciudadanía.

La edila del PVI María Dolores Miralles, que consideró la segunda moción como una «burla», insistió en que 14 de los concejales prefieren que se construya en la ciudad deportiva, es decir, el 75% de toda la corporación. Pero el portavoz socialista, Guillem Alsina, dudó de estas cifras y recordó que el PP mostró inicialmente su preferencia por una «tercera vía, remodelar la piscina privada de la avenida María Auxiliadora».

viabilidad // El portavoz popular, Juan Amat, insistió en que ya se había hecho un proyecto básico, presupuestado en 2,9 millones de euros, sin acordar la localización y sin informar a la oposición. Jan Valls, portavoz de TSV, recordó un informe donde se destacaba que debe intentarse la mayor captación de usuarios y consideró que hay que esperar al informe sobre su viabilidad.