El Ayuntamiento de Vinaròs invertirá alrededor de 360.000 euros para renovar los 3.164 metros cuadrados de suelo de la plaza de San Antonio, conocida como la Mera. Una reforma que desarrollarán tras el verano --a partir de septiembre con dos meses de duración-- para finalizar antes de diciembre. Formará parte de las inversiones financieramente sostenibles para las que el consistorio dispone de más de 1,2 millones del superávit del 2017.

El primer teniente de alcalde, Guillem Alsina; la concejala de Hacienda, María Cano; y el edil de Ordenación del Territorio, Jan Valls, explicaron ayer detalles de la intervención, que variará sustancialmente el aspecto del emblemático y céntrico lugar.

El pavimento escogido será de baldosas de granito gris de tres centímetros de grosor, antideslizantes y resistentes, dos de las características que se requerían para el nuevo piso, ya que el actual es especialmente resbaladizo y además se rompe con facilidad.

GOTERAS // Alsina apuntó que el proyecto incluirá una solución definitiva a las goteras del aparcamiento subterráneo, el refuerzo de la iluminación y la eliminación de elementos del ágora para ganar espacio peatonal, como el cuadrado de piedras que envuelve la fuente central o las olas de la estatua de la sardina.

El edil también señaló que «es una inversión elevada, pero que será rentable, dado que actualmente el gasto anual en mantenimiento es de unos 42.000 euros y después de estos trabajos se prevé reducirlo en un 80%».

Desde que fue instalado, hace más de 11 años -la plaza se remodeló en el 2006-- el firme ha sido muy criticado. En el 2014 el consistorio se quedó además sin reservas de estas baldosas y, como solución provisional, en algunas franjas del pavimento podían verse capas del piso rellenadas simplemente con cemento.

POLIDEPORTIVO // Por otro lado, los responsables municipales anunciaron 80.200 euros para cambiar del parquet de la pista del pabellón polideportivo municipal. Una remodelación que calificaron de «muy necesaria».