Vinaròs se convirtió en el País de Nunca Jamás. En esa lejana y exótica isla donde los niños se pasan la mayor parte del tiempo divirtiéndose. Así fue la Gala de Reinas del Carnaval 2018. Casi tres horas de diversión y el momento de contemplar y disfrutar de los fantasiosos trajes que lucieron las 32 reinas de las comparsas.

Ellas fueron las hadas de la noche. Pusieron la magia y fueron las más admiradas por las más de 7.000 personas que presenciaron la gala en directo en el antiguo campo de fútbol del Cervol y que firmaron una velada que fue para recordar. Y es que en la gala todo estuvo muy pensado para crear un ambiente mágico. Un gran escenario diseñado por el valenciano Ricardo Alcaide y realizado con vegetación natural te transportaba a una isla lejana donde podía pasar cualquier cosa. La potencia de luz y sonido, superior a la de la pasada gala, influyó.

Desde las 17.30 horas, cuando se abrieron las puertas del recinto, el ambiente estuvo especialmente animado con la música del disckjockey Carlos Martorell. La gala se inició con un video de Estudio Pruñonosa y la actuación del Club Mabel Gimnasia Rítmica y la escuela de baile Urbano Muévelo, además de las del gimnasio Gentsana, mientras la academia de baile Locura actuó en mitad del espectáculo. Los presentadores, Cristóbal Garrido, finalista del programa Tu cara no me suena todavía de Antena 3 y el speaker local Benny Sánchez, animaron en todo momento el evento.

La primera reina en salir fue Noelia Arrebola, de la comparsa Tomba y Tomba, con el traje que llevaba por nombre Aquetzali, diseñado por José Vicente Saura Ferreres, mientras que puso el punto y final la comparsa Ara sí que sí, que este año celebra su quinto aniversario, con la reina Jennifer Pineda y su traje Cuauthli, diseñado por Marian y Romero.

Hubo prendas de espectaculares dimensiones, como el de Tot a Orri, cuya reina es Carla Beltrán, de 5 metros de altura y 5 de ancho. De igual tamaño fueron los trajes Welcome to the paradise, de las comparsas Depressa i Corrents, con la reina Idoia García, o Els Mateixos, cuya reina era Eduardo Henrique de Oliveira con su fantasía Aeterneum.

Muy aplaudidas fueron también las comparsas que cumplían años, como La Colla, que celebraba su 35 aniversario. También Tot a Orri y Va que xuta, que llegaron a sus 30 años.

Hoy llega el turno de las 23 reinas infantiles. Su día grande será en el mismo escenario y a las 18.00 horas, después de las paellas de hermandad.