Salvo inconveniente de última hora, la Serratella, un pueblo de la Plana Alta con 95 habitantes, podrá recuperar su bar este próximo fin de semana. Un establecimiento del que no disponen desde octubre, cuando cerró sine die, después de que la gestión del servicio tuviera que salir a concurso público tras la marcha de los antiguos propietarios, que aun así seguirán viviendo en la localidad.

Según explica el alcalde, Alfonso Arín, la previsión de los nuevos dueños (una familia sudamericana que se instalará a vivir en el municipio, ya que actualmente vive entre Benicarló y Peñíscola) era abrirlo este mismo martes, pero la falta de mobiliario de terraza (que de momento es el único espacio que la Generalitat deja abrir en los bares) ha obligado a posponer unos días más la apertura del céntrico local.

El motivo por el que no han podido aún adquirir las mesas y sillas de exterior es debido a la propia paralización que ha sufrido el sector este último mes y medio, desde que entró en vigor el cierre total de la hostelería el pasado 21 de enero, ya que, cuando la semana pasada los nuevos responsables del bar quisieron contactar para incorporar estos elementos, vieron cómo les fue imposible porque distribuidores, comerciales y repartidores seguían en ERTE.

De hecho, su objetivo inicial era reabrir el bar Els Perxes, ubicado en la céntrica plaza del pueblo, a mediados de enero, unos plazos que truncó el decreto que aprobaría el Consell apenas días después. La reapertura del establecimiento pondrá fin a la odisea que ha supuesto para el Ayuntamiento poder encontrar un nuevo dueño, ya que la familia que se ha hecho con su titularidad eran ni más ni menos que los cuartos con la puntuación más alta en la puja. "Eso denota que ha sido un proceso muy difícil. Muchos candidatos no sabían ni dónde se metían, ya que ni tan siquiera cumplían las condiciones marcadas en el pliego", remarca el alcalde, que explica que pagarán al consistorio 90 € más IVA al mes por gestionar el bar.

Tienda multiservicios al mismo tiempo

Además de bar, el nuevo local será también a la vez una tienda multiservicios, una de las subvencionadas por la Diputación para combatir la despoblación en el mundo rural. De este modo, los clientes podrán tomarse un café, comprar una barra de pan o adquirir un brick de leche en un único mismo espacio. "Era fundamental contar con este servicio, ya que, aunque haya vecinos que hagan la compra más cuantiosa fuera de la localidad, hay gente mayor que no puede desplazarse y ahora así podrán adquirir los productos principales sin necesidad de salir de la Serratella", señala Arín.

Y es que, tal como reconoce, poder recuperar el bar significa recuperar la "vida" para el pueblo. "Hacía mucha falta. Era el centro de la vida en la Serratella. No solo por lo que ofrece, sino porque era un punto de reunión para los vecinos y los visitantes", concluye el alcalde.