El Juzgado de Instrucción número 6 de Llíria (Valencia) ha absuelto a los cuatro miembros de España 2.000 acusados de un delito leve de amenazas, coacciones y falta de respeto a la autoridad por la protesta que realizaron ante la vivienda particular de la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra.

La jueza considera que los hechos no tienen «una intensidad tal que puedan ser constitutivos de un delito leve de amenazas», ya que «no puede darse por acreditado que objetivamente se conminara a la denunciante con el anuncio de un mal futuro, más allá de la apreciación subjetiva» de Oltra al vincular a los denunciados con la extrema derecha.

Así lo recoge en la sentencia hecha pública ayer por el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat, según la cual, tampoco concurren los elementos para que estos hechos sean valorados como delitos leves de coacciones o de falta de respeto a la autoridad. Según los hechos probados, la noche de ese 18 de octubre un grupo de encapuchados y/o con caretas de la película Scream se concentró frente al domicilio de Oltra y a través de un altavoz hicieron sonar un pasodoble seguido del himno de España. E hicieron comentarios como: «Estamos en casa de nuestra amiga Oltra de Compromís, poniéndole música española, para decirle que estamos en España».