El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, afirmó ayer en Valencia que sería “fantástico” poder condonar la deuda histórica de todas las comunidades, “pero para poder hacerlo habría que renunciar al paro o a las pensiones, que son fundamentales”. Cierra la puerta así a una de las máximas reivindicaciones políticas del bipartito de la Generalitat del PSPV y Compromís. Precisamente, este es uno de los puntos que los nacionalistas han puesto sobre la mesa de negociación para apoyar la investidura del socialista Pedro Sánchez como presidente del Gobierno de España, quien a su vez ha firmado un pacto para intentar formar Ejecutivo, una muestra de cómo los discursos varían en función de los diferentes intereses territoriales.

SIN FONDOS // “La caja está vacía, la situación económica todavía es delicada”, insistió el líder de Ciudadanos al ser preguntado por la posición de su partido respecto a la reclamación de la deuda histórica valenciana, estimada en unos 13.000 millones de euros.

Albert Rivera hizo estas declaraciones en el Multicentro Social Casa Caridad de Valencia, en una visita a la ciudad. También aprovechó para presenciar la tradicional mascletà de Fallas desde el balcón del ayuntamiento.

“Si todas las comunidades autónomas plantean debates territoriales no cuadraría la suma, como sucede. Ciudadanos apoya un nuevo modelo de financiación, el corredor mediterráneo y más infraestructuras para la Comunitat Valenciana”, clarificó.

Asimismo, reivindicó el acuerdo alcanzado con el PSOE para la formación de un nuevo Gobierno, porque contempla “lo que el Partido Popular no ha hecho teniendo mayoría absoluta, es decir, reformar un sistema de financiación autonómica injusto y poco transparente”.

“Ciudadanos defiende que haya suficiencia financiera para pagar los servicios públicos, queremos plantear el debate de qué vale una cama de hospital en cada comunidad y cómo se paga, pero no un debate sobre reivindicaciones históricas”, agregó el líder de la formación naranja en Valencia, Albert Rivera. H