Compromís plantea que la futura ley valenciana del juego prohíba la instalación de máquinas de apuestas en establecimientos de hostelería y similares para erradicar la «pandemia» de la ludopatía, junto a otras medidas como un sistema de identificación para evitar que jueguen menores o adictos, una distancia mínima de mil metros a colegios y una moratoria de cinco años para conceder nuevas licencias.

El objetivo de esta batería de propuestas es combatir «una adicción comparable a la heroína», como subrayó en rueda de prensa el portavoz de la coalición en Les Corts, Fran Ferri. La ley del juego saldrá previsiblemente adelante esta legislatura como «una de las grandes iniciativas de la legislatura» del Botànic II, tras la aprobación del proyecto durante el pasado mes de octubre, por segunda vez.

alarma // Ante la «alarma social» por la proliferación «indiscriminada» de locales, con unos 500 en funcionamiento en la Comunitat, Compromís quiere prohibir la instalación de máquinas de juego y apuestas y de su publicidad en recintos deportivos, así como no permitir máquinas de apuestas en estos establecimientos de hostelería y no renovar las instaladas actualmente.

También propone un sistema de identificación que podría funcionar con el DNI electrónico o una tarjeta de jugador como en otros países, para evitar que jueguen menores de edad o personas con problemas de ludopatía, y que las máquinas en desuso permanezcan sin actividad sonora o visual. Entre las enmiendas figura el establecimiento de una distancia mínima de mil metros entre los locales de juego y los centros educativos, sanitarios y deportivos, al igual que entre este tipo de establecimientos entre sí, y la prohibición de abrir nuevos en barrios vulnerables.

Otra medida destacada es una moratoria de cinco años en la concesión de autorizaciones para realizar en este tiempo un estudio del impacto sociosanitario que permita fijar limitaciones al número de locales.