La Comunitat Valenciana y la Región de Murcia se comprometieron ayer a sumar esfuerzos contra el actual «agravio» que sufren ambos territorios en materia de financiación autonómica, agua e infraestructuras, sobre todo el corredor mediterráneo.

Así lo pusieron de manifiesto tras una reunión de más de una hora en Alicante los presidentes valenciano, el socialista Ximo Puig; y murciano, el popular Fernando López Miras, quienes destacaron el «nuevo camino de colaboración» entre ambos territorios, por encima de las diferencias que puedan tener por el distinto signo político. Puig y López Miras firmaron acuerdos en financiación, recursos hídricos e infraestructuras, que defenderán en los distintos ámbitos para tratar de corregir la actual situación que genera «desigualdad y falta de oportunidades» a los habitantes valencianos y murcianos. Para el Puig, «si la Comunitat Valenciana y la Región de Murcia tuvieran una financiación adecuada, tendrían un crecimiento superior al 4%», lo cual constituye «una realidad que genera una profunda falta de equidad y un problema para España».

En palabras del murciano López Miras, ambas comunidades están «discriminadas» desde el 2009, año desde el que se «sufre la injusticia de un sistema de financiación» que resulta «injusto e insolidario», y que Murcia se refleja en que cada año recibe 250 millones menos que la media.