El expresidente de la Diputación y del PP de Castellón Carlos Fabra compareció ayer ante la comisión de Les Corts que investiga la gestión en Feria Valencia, donde mostró su extrañeza de que el expresident Francisco Camps tuviera tanto poder como para obligar a que la institución ferial contratara a Orange Market, la empresa relacionada con la trama valenciana del caso Gürtel.

El exdirigente castellonense, además de decir que pondría la mano en el fuego por Camps, señaló que nunca tuvo relación con esta empresa, excepto una vez que recibió a su exgerente Álvaro Pérez, el Bigotes, porque se lo pidió el entonces secretario regional del PP, Ricardo Costa, o la gerente del partido, algo que dijo no recordar en concreto.

«NI LE CONTESTAMOS» // Según explicó Fabra, Pérez quería ver si se le podía adjudicar el expositor de la provincia para Fitur 2010. Se le pidió que presentara un presupuesto, que fue «ocho veces más caro», por lo que no se dignaron «ni a contestarle», apuntó. Sobre el congreso nacional del PP celebrado en el 2008, dijo desconocer de quién fue la decisión de adjudicárselo a Orange Market e indicó que lo único que conoce de ese acto es que el presidente del Gobierno y del PP, Mariano Rajoy, le llamó a Madrid para preguntarle si le iba a apoyar a él o al castellonense Juan Costa.

Preguntado por la compra de 400.000 entradas para la Fórmula Uno o por los regalos de boda hechos por Feria Valencia, dijo que le parece «raro como mínimo» la cantidad, no la fórmula, que la ve buena, y señaló que no recuerda haber recibido ningún regalo durante el tiempo en que fue vocal. «Supongo que estaría castigado por no asistir» a las reuniones de la feria, bromeó el ex dirigente popular, quien indicó que si tiene que asumir su responsabilidad lo hará, pero no tiene conciencia «de haber autorizado ni por activa ni por pasiva situaciones irregulares en la institución». Finalmente, aseguró que él tenía «libertad absoluta» para actuar en Castellón, donde reconoció que mandaba «mucho». A su juicio, «es importante mandar porque cuando uno es jefe y no manda, la cosa no funciona», dijo.