La fiscal superior de la Comunitat Valenciana, Teresa Gisbert, compareció ayer en Les Corts para dar a conocer la memoria de la institución que coordina correspondiente al 2018. Un ejercicio en el que se registró un gran aumento de las denuncias referidas a abusos y agresiones sexuales. Gisbert puso el foco sobre el aumento de las agresiones en manada, «un término recientemente acuñado que define muy bien el efecto devastador que produce en las víctimas», dijo, pero sobre todo, «una forma especialmente cobarde que las deja en shock e incapaces de defenderse», más cuando se graban y se reproducen a través de las redes sociales.

El resumen de actuaciones del ejercicio pasado refleja un total de 617 abusos, lo que supone un aumento del 35%. Además, hubo una subida del 15,8% en las agresiones sexuales hasta contabilizar 517 casos, junto a 17 situaciones de violación.

Ante estas cifras, la fiscal reclamó un mayor esfuerzo en prevención y en la educación en perspectiva de igualdad «en todos los ciclos formativos». Añadió que el machismo «no desaparece de la sociedad y debe llevar a una reflexión muy necesaria», si bien reconoció que cada vez es más patente el avance entre la sociedad en la perspectiva de género.

Respecto a la propuesta de cambios legislativos, pide la modificación del artículo 416 de la ley de enjuiciamiento criminal, sobre la dispensa a la obligación de declarar por razones familiares, ante «la imposibilidad de saber si se hace por temor, coacción o simplemente porque se es consciente de que lo denunciado no era cierto». Y apostó porque sea voluntario y no obligatorio formar parte de un jurado.

BALANCE PROVINCIAL / Dentro de las estadísticas, el documento presentado por Gisbert detalla los casos ocurridos en el conjunto de Castellón. Uno de ellos, la muerte violenta de una mujer, a manos de su pareja, un hombre que fue detenido dos meses después en Argentina. También hubo que lamentar el fallecimiento de dos niñas por su padre, que después se suicidó y estaba en trámites de divorcio. Un hecho que creó un fuerte impacto social. Otro procedimiento activo es el de la muerte a cuchilladas de un hombre que intentó defender a su pareja de su expareja, ocurrido en el Grau de Castelló.