La política educativa del Consell continúa como uno de los caballos de batalla de la oposición popular al Consell de PSPV y Compromís, en un enfrentamiento que ha vivido un nuevo episodio cuando la presidenta del PPCV, Isabel Bonig, ha anunciado la admisión a trámite por parte del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat (TSJCV) del recurso que presentó su formación contra el decreto de los conciertos autonómicos de educación.

La lideresa popular interpretó esta decisión del TSJCV como un paso adelante más en su lucha para derogar la normativa, y lo esgrimió como una nueva razón para pedir la dimisión del conseller de Educación, Vicent Marzà.

Este, por su parte, respondió desde Finlandia, donde se halla esta semana junto con el presidente del Consell, Ximo Puig, precisamente, para conocer de cerca el sistema educativo de ese país. Marzà criticó la postura popular y aseguró que está «muy tranquilo», así como tachó de «puro trámite», de una «cuestión administrativa», esa admisión por parte del TSJCV, que considera que no entra en el fondo de la cuestión.

Para el conseller, «poco tiene que decir el PP sobre educación» porque lo único que ha hecho ha sido «dar pasos atrás» y lamentó que al parecer quiera seguir así, ya que «no quiere que avancemos, que nuestros niños aprendan castellano, valenciano e inglés y tengan un sistema educativo totalmente normalizado».

Isabel Bonig recordó, además, que el pasado viernes se conoció que el tribunal también ha admitido para su tramitación los recursos contra el decreto de plurilingüismo interpuestos por la Diputación de Alicante, la Plataforma en defensa de los derechos del castellano y por los propios diputados del Partido Popular.

Por ello, reclamó a la Conselleria de Educación que retire esos decretos y los consensúe con la comunidad educativa, pues de lo contrario la «única vía» que quedará será la de las manifestaciones en la calle, y las demandas ante los tribunales.

El nuevo cruce de acusaciones se produjo después de que el pasado fin de semana el centro concertado castellonense Mater Dei -el único en la provincia que perderá el concierto para Bachiller- se incorporara a la plataforma valenciana contra el decreto autonómico. Esta normativa afecta en Castellón en alguna medida a los 34 centros concertados existentes, en los que cursan sus estudios 18.594 alumnos en el curso académico 2016/2017, lo que representa un amplio colectivo.

En cuanto al decreto de plurilingüismo, implica a cada centro castellonense salvo los del Alto Palancia y la mitad del Alto Mijares, castellano parlantes, que han optado por el modelo básico.