Los grupos parlamentarios en Les Corts Valencianes celebraron ayer la apertura del juicio oral por el accidente del metro del 2006, en el que fallecieron 43 personas y otras 47 resultaron heridas, y que después de casi trece años del suceso vaya a hacerse «justicia» por la vía penal.

Sin embargo, el diputado del PP Alfredo Castelló manifestó que su partido «respeta» todas las decisiones judiciales «igual» que lo hace con «cualquiera de los archivos que hizo la instructora del caso», la titular del Juzgado de Instrucción número 21 de València, quien a su juicio «hizo una instrucción procelosa».

En el juicio oral se sentarán en el banquillo ocho exdirectivos de Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV), durante el gobierno del PP, y al respecto Castelló ha señalado: «No nos queda más que confiar en la presunción de inocencia y que haya una sentencia que dicte justicia». Por su parte, el president del Consell, Ximo Puig, apuntó durante la celebración de unas jornadas contra la despoblación, que tiene la «esperanza absoluta» de que haya un juicio justo y recordó que existe una responsabilidad política del gobierno anterior que aún no se ha asumido en su totalidad.

puig lamenta el retraso // «Desgraciadamente ha tardado mucho tiempo en hacerse este juicio oral, ha habido muchas vicisitudes», manifestó sobre el retraso en la apertura de juicio oral.