El que fuera secretario general del PSPV-PSOE entre los años 2000 y 2007, Joan Ignasi Pla,aseguró ayer que «no ha habido financiación ilegal» en este partido, del que puede asegurar que aplicó «un estricto cumplimiento de la legalidad» y donde «se hicieron las cosas bien». En su intervención en la comisión de Les Corts que investiga la financiación electoral de su formación y el Bloc en el 2007 y el 2008, el exlíder socialista afirmó que desconocía «el día a día» de la gestión ni de las cuentas económicas y descalificó los informes policiales realizados a instancias del juez al afirmar que les da «la misma credibilidad» que el PP le daba a los documentos de la Guardia Civil sobre Camps y la trama Gürtel.

Junto a Pla, comparecieron en Les Corts la exdirectora general de Consumo, Etelvina Andreu, que optó por no declarar, y el director de la empresa Crespo Gomar hasta el 2007, Vicente Benlloch.

El ex dirigente socialista, quien fue el candidato del PSPV a la presidencia de la Generalitat en 2007, defendió que el partido trabajó con la empresa Crespo Gomar en 2006 por el «prestigio» que tenía y añadió que se le pagaron por sus servicios 400.000 euros que constan en la contabilidad del partido y en la fiscalización de esas cuentas. Pla justificó que la formación no conserve esas facturas doce años después, pues no hay obligación de hacerlo transcurridos cinco años.

En su intervención parlamentaria, admitió que conocía personalmente a Alberto Gomar, pero no a José Crespo, y que esa empresa de comunicación había recibido un premio de la Cámara de Comercio y tenía «más de 80 clientes», entre ellos el Banco de Valencia, muchas inmobiliarias y otros partidos políticos.

«No era un chiringuito, era una empresa seria, tenía un nivel importante y por eso acudimos a ella», aseveró el exdirigente socialista, quien añadió que este caso «no se puede comparar en absoluto con Gürtel», como algunos han hecho: «no tiene nada que ver».

El director de Crespo Gomar entre 2000 y 2007 indicó que él era «un empleado» pero afirmó que no tuvo conocimiento de que «se haya facturado por algo que no se hiciera; no tengo conocimiento de que se hicieran cosas extrañas . La empresa llegó a facturar 10 millones y era la segunda firma de comunicación de la Comunitat.