El pleno de Les Corts Valencianes acordó ayer tramitar una propuesta de Podem para cambiar la ley del estatuto de los expresidents de la Generalitat del 2002 con el fin de eliminar que sean miembros natos del Consell Jurídic Consultiu (CJC) y limitar los medios materiales a su disposición.

El inicio de los trámites se aprobó por unanimidad, pero el resto de grupos alertó de que hay mucho por debatir.

Podem pide sustituir la condición de miembros natos del CJC durante 15 años de los expresidents por la de miembros natos del Comité Econòmic i Social (CES) durante 5 años como máximo, y fijar supuestos de revocación del tratamiento honorífico y de sus medios en caso de sentencia condenatoria firme por delito contra la Administración pública. También propone introducir obligaciones en materia de transparencia respecto de las actividades desarrolladas con sus asignaciones monetarias.

La iniciativa la defendió la diputada de Podem Fabiola Meco, quien recordó que las oficinas de José Luis Olivas, Francisco Camps y Alberto Fabra han costado hasta el momento un millón de euros.