Sin salirse del guión propio de sus colores políticos, los partidos de la oposición, PP y Ciudadanos, calificaron ayer como negativa o “no aprobada” la acción del Consell a un año desde los comicios autonómicos, frente a la valoración positiva de los representantes parlamentarios del PSPV y Compromís, ambos del equipo de gobierno autonómico.
Los portavoces parlamentarios coincidieron en el acto de entrega del premio Convivencia que entrega la Fundación Manuel Broseta, concedido en esta edición a Acnur. En declaraciones a los periodistas, la portavoz del PP, Isabel Bonig, consideró que “un año es tiempo suficiente para hacer balance de un Gobierno que vino a rescatar personas y, en cambio, no ha efectuado más acción política que la inercia de proyectos iniciados por el PP”.
“El Consell no ha aprobado una sola ley, tiene grandes problemas de coordinación y no ha resuelto la inquietud que genera la falta de empleo. Se sustenta en un pacto de mucha demagogia, mucho mestizaje que en el fondo esconde control. Es un balance tremendamente negativo”, agregó.
A juicio del portavoz socialista, Manolo Mata: “Llevamos un año inmersos en el sentido común puro y duro, hemos sucedido a un régimen, no a un Gobierno. Con las arcas fundidas se ha eliminado lo superfluo, lo caro, lo que no aportaba nada”.
“El sentido común hace que avancemos poco a poco”, dijo, aunque aseguró que “las grandes promesas se han cumplido, un año sin robar aporta mucho”.
Para Fran Ferri, portavoz de Compromís, “la valoración es positiva, han caído símbolos como era Rita Barberá y se han cambiado todas las coordenadas del Consell”. “Si antes se beneficiaba a unos pocos con políticas de grandes eventos, ahora se rescatan personas y se beneficia a muchos”, añadió ayer.
Por su parte, el portavoz de Ciudadanos, Alexis Marí, ha calificado al Consell con un “no aprobado” porque “está en el eterno lamento de la financiación”, una reivindicación que su partido apoya, pero que “no es óbice para la falta de gestión”, concretó. H
