El president de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, aseguró ayer que el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, “sabe perfectamente” cuál es la situación de la Comunitat Valenciana y “no se puede pedir imposibles” en referencia a la reducción del déficit autonómico. Puig, que presentó ayer un nuevo modelo de Servicios Sociales “más municipalistas y próximos” junto a la vicepresidenta Mónica Oltra y el secretario de Inclusión, Alberto Ibáñez, contestó al ministro Montoro, quien el viernes advertía al Gobierno valenciano de que, si no cumple con lo que marca la ley, el Estado se haría cargo del pago de las facturas pendientes de sus proveedores “con la consiguiente retención de fondos autonómicos”. Montoro respondía a la vez a Mónica Oltra, que avanzaba que el Gobierno valenciano negociará un aplazamiento de pagos a grandes empresas suministradoras de la Generalitat, hasta un máximo de 170 millones de euros.
“Me gustaría que pasara el fin de semana para rebajar la tensión”, señaló Ximo Puig, quien añadió que cree que “sería bueno” que el “señor Montoro explicitara lo que sabe, y él sabe perfectamente que la Comunitat está infrafinanciada”. “Sabe que tiene dificultades porque ha habido una mala gestión en el pasado”. Según el presidente, “lo que no se puede es pedir imposibles y nosotros no estamos dispuestos a recortar más porque sería una cosa absolutamente inasumible”.
Preguntado por si cree que es posible llegar a un acuerdo la próxima semana, dijo que “espero que si. Se ha hecho un recorte de 900 millones, que es imposible, y ahora hablamos de 170 millones, pues vamos a negociar”. “Me parece una situación no deseable, creo que los problemas de incumplimiento del déficit por parte de España ante la UE no son los de las comunidades autónomas, son en parte del Estado”. H
