El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, consideró ayer prioritaria la lucha contra el fraude fiscal, con una administración tributaria “lo más potente posible”, que “fortalezca” además el estado del bienestar y recaude en función de la economía de cada persona. Puig consideró que es necesario un “debate transparente” y que sirva también para mejorar la “conciencia fiscal” del conjunto de la sociedad.

CONTRA PARAÍSOS FISCALES // El president, que participó ayer en la primera reunión del grupo de expertos de la comisión para el estudio de la reforma tributaria, advirtió además de que el Consell “va a exigir que no hayan en España paraísos fiscales”.

“En estos años ha habido un problema muy grave que ha sido la deserción de la obligación de mantener una administración potente porque la propia administración tributaria valenciana está raquitizada”, lamentó.

El jefe del Consell indicó que su gobierno parte de unas políticas “erráticas, cuando no absolutamente en contra de la progresividad”, una corresponsabilidad fiscal del 20% y un sistema sustentado en base a la nueva financiación autonómica. Puig destacó que la comisión, que preside el catedrático de Derecho Financiero y Tributario Juan Martín Queralt, está integrada por los “mejores expertos”, es “paritaria” y con una “visión territorial”.

Aun consciente de la situación de “incerteza” por el futuro del Gobierno de España, a su juicio, los problemas del incumplimiento del déficit público han sido provocados por una reforma fiscal que es “absolutamente injusta y con falta de rigor”.

Al respecto, el conseller de Hacienda, Vicent Soler, explicó que la Comunitat quiere ir a la mesa de la negociación del nuevo sistema de financiación autonómico con “los deberes hechos”, con un esfuerzo fiscal a “la altura de las circunstancias” y de la forma “más rigurosa”, y por ello se crea esta comisión. Sobre la persecución del fraude y nuevos impuestos, dijo que están “todavía al principio del camino”, y que se trata de hacer unos impuestos “armonizados” y “coherentes”, que superen las disfunciones actuales, e impulsar la “progresividad” como principio constitucional. Además, el conseller replicó al Ministerio de Hacienda que “no hay argumentos sólidos, teóricos, fiscales y financieros” para pedirle a la Comunitat Valenciana que revise el déficit. H