El president de la Generalitat, Ximo Puig, se reunió ayer con la presidenta de Andalucía, Susana Díaz, y con la de las islas Baleares, Francina Armengol, para «desatascar» la paralización de la reforma del modelo de financiación autonómica.

Estos encuentros forman parte de la ronda de contactos que ha iniciado el president con representantes de los grupos políticos del Congreso, líderes políticos y presidentes autonómicos, según recordó en la feria Fitur.

Puig lamentó que hace un año que se reunió la Conferencia de Presidentes autonómicos y, entre otros acuerdos, se decidió abordar en 2017 el cambio de un modelo de financiación que «perjudica de manera clara» a la Comunitat Valenciana.

El dirigente afirmó sentirse «muy defraudado» porque ha pasado un año y el Gobierno «no ha sido capaz de dar una solución» pero «no podemos resignarnos» y, según dijo, en las próximas semanas «se tiene que desatascar».

El presidente de la Generalitat recordó que el pleno del Gobierno valenciano aprobará hoy solicitar su comparecencia ante la comisión general de las comunidades autónomas del Senado para explicar la posición de la Comunitat Valenciana de «exigencia de un cambio de modelo».

Esa modificación «tiene que ayudar al conjunto del sistema autonómico y no solo a la Comunitat, concretó Puig, que defendió la solidaridad regional.H