El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, ha aprovechado la primera cita que se produce fuera de Bruselas del grupo de trabajo europeo sobre el Corredor Mediterráneo para reivindicar que se ejecute y finalice esta infraestructura “sin más dilaciones, cambios de criterio ni regateo de dotaciones presupuestarias”, dado que se trata de una infraestructura “fundamental” no solo para la Comunitat Valenciana y España, sino también para el conjunto de la Unión Europea. El jefe del Consell ha hecho énfasis en que la elección de València para acoger esta jornada de trabajo del grupo de Nodos Urbanos y Regiones del Corredor Mediterráneo, promovida por la Comisión Europea, constituye un “gesto”, que da cuenta de “lo central que es esta infraestructura para la Comunitat Valenciana”, según ha señalado la Generalitat a través de un comunicado.

A la cita de este jueves, que cuenta con la asistencia, entre otros, del coordinador europeo del Corredor Mediterráneo, Laurens Jan Brinkhorst, también han acudido el secretario de estado de Infraestructuras, Transporte y Vivienda, Julio Gómez-Pomar, así como la consellera de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio, María José Salvador. Puig, que ha participado en el acto de apertura de la jornada, ha pedido que el endeudamiento público que se precise para ejecutar las infraestructuras del Corredor no forme parte de las obligaciones sobre deuda y déficit actualmente existentes.

En este sentido, ha apuntado que dicha infraestructura representa un “hito” que necesita del fortalecimiento de los instrumentos comunitarios utilizables para su financiación, como el Mecanismo de Conexión Europea y el Plan Juncker. Tal y como ha explicado, se trataría de una “excepción justificada”, puesto que, por cada euro invertido en el Corredor Mediterráneo, el retorno, en aumento del PIB, sería de seis euros, según un estudio de 2015 del Instituto Fraunhofer.

El presidente de la Generalitat ha asegurado, ante los miembros del grupo de Nodos Urbanos y Regiones del Corredor Mediterráneo, que esta infraestructura supondrá “una influencia positiva sobre la productividad de las empresas de la Unión Europea”, y permitirá la reducción de emisiones contaminantes para cumplir lo acordado en la Conferencia de París.

En cuanto a las cifras, el tramo genuinamente mediterráneo del corredor acoge a las comunidades autónomas de Cataluña, Comunitat Valenciana, Murcia y Andalucía, que fabrican el 55% de la producción industrial; expiden el 51% de las exportaciones nacionales; reciben al 50% del turismo que visita España y concentran el 60% del tráfico terrestre de mercancías y el 82% del tráfico de contenedores.

Además, une a varias de las más importantes ciudades españolas, entre ellas València, Barcelona, Castellón, Alicante, Murcia y Málaga, así como a los puertos más activos del país, como es el caso del puerto castellonense, el sexto del ránking nacional que más crece.