El president de la Generalitat, Ximo Puig, apremia al Gobierno de su partido a encontrar una solución para el pesquero de Santa Pola con 11 migrantes a bordo y actuar con máxima diligencia. El jefe del Consell aseguró ayer sábado que entiende que es complicado buscarla, pero insistió en que «ahora mismo el punto de vista humanitario es absolutamente prioritario». Puig realizó estas declaraciones instantes antes de asistir al estreno de la temporada operística en el Palau de Les Arts de València, junto al ministro de Cultura, José Guirao.

«Lo que queremos es que se encuentre una solución, sabemos que es complicado, ya que tiene que ver con la legalidad internacional, pero el punto de vista humanitario es absolutamente prioritario. En estos momentos las personas que están en el barco pasan por una grave dificultad y hemos de encontrar una solución inmediata», destacó. Asimismo, apuntó que «los países de Europa han de ser conscientes de que no se puede hacer del Mediterráneo un cementerio».

Por su parte, el patrón del pesquero Nuestra Madre de Loreto, Pascual Durá, informó de que la situación a bordo se está volviendo «cada vez más insostenible» y que entre la tripulación «coge fuerza la idea de que va a repercutir gravemente en nuestra salud --la de todos los ocupantes-- y en el estado en que se halla el barco».

El patrón de la embarcación que rescató hace una semana a 12 inmigrantes en el Mediterráneo está en contacto permanente con el armador del barco y la cooperativa a la que pertenece, y admite que se baraja la posibilidad de iniciar su vuelta hacia Santa Pola, un puerto al que tardarían en llegar entre cuatro y seis días, dependiendo del estado del mar.

En una conversación vía satélite con Efe, Durá explicó que la decisión todavía no es firme, sino que «estamos a la espera de una solución», pero que, de momento, mantiene el motor del barco parado para ahorrar combustible. «La situación es como se ha descrito -en referencia a la escasez de víveres-», reconoció. Admitió que, la mejor opción «si Dios nos ayuda» es la de regresar a Santa Pola, aunque insistió en que «no vamos a tocar los motores hasta que no resolvamos qué hacer». La alcaldesa de Santa Pola, Yolanda Seva, reclamó ayer al Gobierno central una solución «firme» que resuelva la situación del pesquero, que hace nueve días rescató a 12 inmigrantes frente a las costas de Libia. En la localidad alicantina hubo ayer protestas de familiares de la tripulación.