Fue aprobado en el 2018 como un instrumento para proteger el litoral que queda virgen en la costa valenciana, pero el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV), a través de la sala de lo contencioso, comunicó ayer la anulación del Plan de Acción Territorial de la Infraestructura Verde del Litoral (Pativel) por ser «contrario a derecho».

Estima el recurso de una empresa de la provincia de Alicante, que argumentaba una serie de errores técnicos de tramitación. Entre ellos, la sentencia alude a la falta de una memoria económica que detalle los costes de su implementación, o la ausencia de «un análisis técnico riguroso sobre la base de los aspectos medioambientales, paisajísticos o territoriales». La sentencia tiene un voto particular que difiere de la mayoría de la sala.

Es la primera resolución conocida sobre este proyecto, aunque hubo más procedimientos en los tribunales. Entre ellos, los recursos de los ayuntamientos de Alcalà de Xivert, Peñíscola, Orpesa y Moncofa, o de la asociación de constructores Apecc.

La sentencia indica que era «exigible en la tramitación del Pativel la emisión de un informe de evaluación de impacto por razón de género», cosa que no ocurre, algo que según la resolución debería estar en todos los instrumentos de ordenación urbanística.

Respuesta del conseller

Tras difundirse la decisión judicial el conseller de Política Territorial, Arcadi España afirmó que no es una sentencia firme, y que la Generalitat presentará un recurso de casación. Además, el departamento menciona que hay un «cambio de criterio y de rumbo en la valoración de la sala, que anteriormente se había pronunciado en términos favorables». Además, el fallo «no entra a valorar el contenido del Pativel como herramienta de protección del litoral, sino aspectos formales del mismo». Puntualiza que sí existen informes técnicos presentados, «pero la sala los considera insuficientes».

Desde los municipios que acudieron a la justicia el alcalde de Alcalà, Francisco Juan, dijo estar a la espera del proceso iniciado por el consistorio, «pero queda claro que esta sentencia recoge y da como buenos los argumentos defendidos por nuestro Ayuntamiento». El primer edil de Peñíscola, Andrés Martínez, añadió que ahora «se abre una oportunidad para preservar el litoral y que haya diálogo con los ayuntamientos».

Desde Moncofa, Wences Alós detalló que el recurso «se debió a errores técnicos y es una lástima que se haya tenido que llegar tan lejos para un asunto que hubiera sido evitable». La alcaldesa de Orpesa, María Jiménez, recordó que el recurso fue por parte del anterior equipo de gobierno y lamentó este fallo. «Es una mala noticia, porque el Pativel tenía la intención de proteger el litoral».

Desde el PP, Elisa Díaz celebró la nulidad. «Ya advertimos de los defectos de forma», señaló, y recordó que su formación también presentó un recurso en contra.

Debate encendido a pie de costa

Ni los dos periodos de alegaciones ni los debates públicos en los que participaron dirigentes de la Conselleria lograron calmar los ánimos durante la tramitación. Para los partidarios, el Pativel constituye una oportunidad única de salvaguardar el escaso territorio próximo a la costa libre de urbanizaciones. En cambio, los detractores denunciaron que había agravios comparativos (no todos los municipios tenían el mismo grado de afectación) e incluso hablaron de expropiaciones encubiertas.

Existen dos tipos fundamentales de protección. Por un lado, una franja de 500 metros desde la orilla, que no permite construir. Luego hay otra zona de refuerzo, hasta los 2.000 metros, que sí da opción a las edificaciones, pero de manera muy limitada. En áreas como Capicorb de Alcalà o la Renegà de Orpesa hubo quien puso el grito en el cielo. Los propietarios de suelos urbanizables, con opción a poder construir en el futuro, veían truncadas sus expectativas. De ahí que uno de los argumentos de la sentencia de ayer incida en el informe económico. Los afectados podrían presentar reclamaciones patrimoniales ante la desclasificación y la pérdida de su valor. El plan deja claro que no se puede urbanizar, pero no detalla si hay que pagar a los perjudicados.

El Pativel también incluía un catálogo de playas naturales, con 20 puntos en Castellón, con categorías en función de los niveles de protección previstos.

Una de las primeras actuaciones relacionadas con el plan era la vía verde entre Benicarló y Vinaròs. Sus responsables políticos en este caso, ligaban la protección de este entorno con la llegada de inversiones que pusieran en valor este entorno.