Todos a una y «sin fisuras», incluido el Partido Popular de Isabel Bonig. El presidente de la Generalitat valenciana, Ximo Puig, celebró ayer una ronda de contactos con todos los protavoces parlamentarios en Les Corts con el fin de escuchar su opinión cara a la trascendental convocatoria de la Conferencia de Presidentes Autonómicos prevista para el próximo martes, 17 de enero, y en la que se tiene que fijar la hoja de ruta para que se revise el actual sistema de transferencia de fondos por parte del estado a las distintas comunidades, y que ahora es claramente perjudicial para la Comunitat Valenciana.

El objetivo es dar la imagen de unidad cara a una reunión que se anuncia muy complicada --se da por hecho que los territorios sobrefinanciados no aceptarán una pérdida de recursos en detrimento de los infrafinanciados-- y que se espera como agua de mayo por parte de la Generalitat, que arrastra una deuda de más de 43.000 millones, y que necesita de los recursos para poder llevar a cabo sus líneas políticas, teniendo en cuenta que, en el vigente reparto, cada ciudadano de la Comunitat percibe unos 200 euros menos que la media nacional.

El president Ximo Puig se citó ayer, por este orden, con la presidenta del PPCV, Isabel Bonig; el portavoz en Les Corts de Ciudadanos, Alexis Marí; el de Podemos, Antonio Montiel; el de Compromís, Fran Ferri; y el del PSPV-PSOE, Manuel Mata. También se entrevistó con el coordinador de EU, David Rodríguez, quien a pesar de no tener representación en la cámara autonómica sí la tiene en el Congreso de los Diputados. Cerró la ronda la vicepresidenta del Consell y coportavoz de Compromís, Mónica Oltra.

Aunque todos los líderes políticos resapaldaron a Puig en la necesidad de cambiar el sistema de reparto de dinero entre las autonomías, de todos los encuentros, el más trascendente fue el de Isabel Bonig, ya que es el PP quien tiene la clave a nivel nacional para desbloquear la tan reivindicada financiación autonómica para la Comunitat Valenciana. En este sentido, la lideresa de los populares valencianos fue rotunda, ofreciendo «apoyo sin fisuras» desde el PPCV a las negociaciones que liderará Puig y sin pedir «nada a cambio», con la única premisa de que reivindique una financiación «justa» para los valencianos.

La reunión duró una hora, que la presidenta del PPCV calificó de «cordial y sincera», argumentando a su término su postura en que el cambio del modelo de financiación es «crucial» para la Comunitat, tras lo que añadió que el PP estará a la altura, como está convencida de que también lo estará Puig. Isabel Bonig dijo, en rueda de prensa, que confía en que la Conferencia de Presidentes Autonómicos sirva para fijar los plazos para el cambio en la financiación, iniciar procesos concretos en otros asuntos y para que tanto el Gobierno como las comunidades conozcan la realidad del resto de España.

DIÁLOGO Y MÁS ACUERDOS // Y en este sentido, también pidió que la «lealtad» que existe entre el PP y el PSOE «a nivel nacional», se extienda «también a la Comunitat» y que se respeten los acuerdos alcanzados por ambos partidos, tras lo que pidió «menos radicalidad, ideología y sectarismo, y más diálogo», algo en lo que, según dijo, Puig tiene «la mano tendida del Partido Popular».

Entre los asuntos que citó en los que se podrían alcanzar acuerdos, desgranó «un pacto educativo autonómico» y «la financiación de los ayuntamientos», además de trasladarle al presidente del Gobierno regional la necesidad de que el Gobierno central escuche a las autonomías, especialmente a la valenciana, en materia de «fondos europeos».

Sobre las malas relaciones entre populares y socialistas, Bonig arguyó que «el pasado, pasado es», y que la Comunitat no necesita «ni vencedores ni vencidos», sino «justicia». Y se comprometió a estudiar el proyecto de la Agencia Valenciana de la Innovación, proyecto personal que impulsa el propio Ximo Puig.