La Unió de Llauradors considera intolerables las nuevas acciones vandálicas de los agricultores franceses contra nuestros productos, en este caso vino, y pide la reacción inmediata y enérgica de todas las Administraciones Públicas (Unión Europea, Ministerio de Agricultura y Conselleria de Agricultura).

Ayer un grupo de viticultores del sur de Francia volvió a derramar la carga de dos camiones de vino transportado en cisternas, uno de los cuales había sido cargado en Chiva, como medida de protesta según ellos por la competencia desleal española, recrudeciendo las protestas que ya realizaron el pasado año, fundamentalmente en el mes de abril.

La Unió de Llauradors pide al Gobierno español una vez más que exija inmediatamente a las autoridades comunitarias la necesidad de que se garantice la libre circulación de mercancías valencianas y del resto del Estado español en su paso por territorio francés. Del mismo modo insta a la Conselleria de Agricultura a que traslade al Ministerio de Agricultura su más enérgica protesta por unos ataques que no se pueden consentir en pleno siglo XXI.

Esta organización profesional agraria considera que no se pueden permitir los obstáculos que ponen continuamente los agricultores franceses a la libre competencia y a la libre circulación de productos agrarios valencianos y españoles. Por ello reclama medidas de control y que se establezcan duras sanciones ejemplarizantes por no respetar la legalidad comercial europea.

La Unió recuerda a los agricultores franceses que se equivocan en la dirección de sus protestas porque el sector agroalimentario francés también exporta productos hacia el Estado español y lo que están haciendo es romper las reglas de juego. En lugar de actuar contra las grandes cadenas de distribución, muchas de ellas con capital francés y que marcan su posición abusiva de dominio en los precios, la toman contra los productores que “sufren las mismas prácticas abusivas que sus homólogos franceses.