Solidaridad, altruismo, cooperación, concienciación... Hay muchas palabras para describir la tarea que lleva a cabo la oenegé de Burriana Amor en Acció pel Món, un colectivo que acaba de regresar de Costa de Marfil tras una expedición sanitaria que ha centrado sus esfuerzos en las regiones de Iffou, La Me y Agnebi Thyassa. Ocho voluntarios de Burriana y Betxí volvieron hace poco a la provincia del país africano, donde pudieron ayudar durante casi 15 días a más de 3.000 personas. Diagnosticaron casos de paludismo, anemia, otitis y desnutrición, entre otras patologías.

La organización, compuesta por médicos, enfermeras, educadores, ingenieros y otros profesionales, también lleva a cabo proyectos en Paraguay y Burkina Faso. Amor en Acció Amor examinó en su último viaje a ancianos, niños, mujeres embarazadas y otros adultos. Su personal derivó también durante su estancia a diversos pacientes con necesidades hospitalarias concretas a estos centros y costeó sus gastos.

Cabe destacar, asimismo, el trabajo de campo realizado por dos audioprotesistas de la oegené participantes en la expedición --de la empresa familiar valenciana Audiotechno-- que aportaron 60 audífonos (valorados en unos 90.000 euros, según el colectivo) para personas sordas. Estos aparatos permitieron que, por primera vez en su vida, muchas personas lograran oír la voz de sus allegados y los sonidos del mundo. Un momento, sin duda, tan emotivo como alegre para los protagonistas.

El grupo visitó, además, un colegio en el departamento de Akoupe, en cuyas aulas había más de 60 alumnos por clase y los educadores contaban con muy pocos medios para enseñar.

«El tiempo se ha hecho corto. Han sido unos días de un trabajo duro y agotador, pero muy agradecido. Las sonrisas que hemos recibido de toda esa gente pagan con creces todo el esfuerzo realizado», explica Rocío Esteller, una de las voluntarias de la oenegé.

Amor en Acció ha involucrado en su proyecto al Hospital Comarcal de Vinaròs, el General de Castelló, el Vithas Rey don Jaime, el Quirón de València, la clínica oftalmológica doctor Ibáñez de Castelló y a la clínica odontológica doctor Jorge Ferrel Burriana. El material sanitario y los medicamentos que hacen llegar en sus viajes llegan a África como un soplo de aire fresco.