La semana pasada recibí, por partida doble, una noticia que me llenó de enorme alegría y satisfacción: el joven pintor castellonense Carlos Asensio había obtenido la beca de Arte de la prestigiosa Fundación Dávalos Fletcher, para llevar a cabo un interesante programa artístico en la capital de Alemania.

LAS BECAS de Investigación, de Arte y Música de la Fundación con sede en la calle Gasset de Castellón, han supuesto, a lo largo de sus 26 ediciones, un importante acicate para varios jóvenes músicos, artistas y científicos que, merced a la ayuda de la filantrópica institución, han llevado a cabo significativos proyectos que en muchos casos fueron trascendentales en su formación y en su carrera profesional.

Puedo hablar en primera persona de Carlos Asensio, pintor dotado donde los haya, quien tuvo a bien colaborar, con muchos otros destacados colegas, en la ilustración de la Crónica que hace cuatro años escribí sobre la historia de Castellón.

EL JOVEN ARTISTA castellonense está iniciando su tercera década de vida y posee ya un significativo currículum en su haber. Investigador activo en pro de la mejora de su ya muy elogiable técnica y de los renovadores lenguajes plásticos, huyendo de lo convencional, anhela conocer en Berlín referentes que estimulen su creatividad a través de convivencias y cursos de formación, para cotejarlos con sus criterios y crear un referente que enriquezca su ya muy estimulada inspiración.

Ya lo dijo Esquilo: «sciens commoda sapientem».

*Cronista oficial de Castellón