Nunca algo tan sencillo como colgar un vídeo musical en youtube de alguien que quiere ser cantante no solamente puede traer la fama, sino además, las críticas negativas al mismo tener efecto boomerang, y crear todo un universo de fans y admiradores que ponen sobre un pedestal al que, en principio, iba a ser defenestrado por gurús en la materia.

Y eso es lo que le ha pasado al joven castellonense Roberto Clausell, casi un clon de Abraham Mateo por su físico de adolescente rebelde, quien su videoclip de la canción Hey woman en el canal viral ha recibido ya más de 257.00 visitas, en una grabación que recoge diversos escenarios de un Benicàssim de carretera y asfalto.

Más aún desde que AuronPlay, uno de los más afamados youtubers en España, conocidos por sus comentarios irónicos y burlones sobre los videos que encuentra la red (se río a mandíbula batiente de Paquirrín o de Ylenia), cometió la osadía de satirizar el videoclip de Clausell. Tanto atrevimiento no ha hecho más que lanzar al estrellato al joven a quien muchos consideran ya el Abraham Mateo de la Plana, y eso que a AuronPlay no se le cayeron los anillos al descalificarle como “Abraham Mateo de marca blanca, de Hacendado”.

Roberto Clausell, y con todos los condicionantes a favor para dedicarse profesionalmente a la canción, que es lo que ansia profundamente, asegura que no le afecta “para nada” haber sido la diana del díscolo y ácido youtuber, que no le importan las críticas y que, incluso presume de tener su propio grupo de fans, a las que llama clausellers, sí, sí como las beliebrs, gemeliers, auryners, etc. De entrada, la joven promesa de la canción ha firmado ya un contrato con Cima Records, y hay hasta 7 discográficas que van detrás de su talento.

ARTISTA EN CIERNES // Clausell es consciente de que el camino emprendido no va a ser fácil. Su videoclip se ha convertido en uno de los fenómenos virales de la temporada pero no quiere que sea flor de un día. Así, tiene ya perfilado el que será su primer concierto, el 24 de julio en l’Alcora, localidad donde ya pinchó en la fiesta del Rotllo y rodeado de gran expectación.

Será su prueba de fuego, la prueba del algodón para demostrar a los escépticos que sirve para cantar. Mientras, su videoclip sigue virando en la red y cada vez son más los que se están acostumbrando a la tenue voz de un joven adolescente que quiere hacer realidad sus sueños de cantante.

Algo que el AuronPlay tendrá que tragarse. Porque su propia sátira se convertirá en el respaldo a un éxito que Roberto Clausell se está trabajando. H