El colectivo LGTBI de Castellón celebró ayer el Día del Orgullo Gay reclamando «igualdad efectiva y la no discriminación», pidiendo «leyes estatales y autonómicas contra la LGTBfobia» y «la retirada de todo tipo de subvenciones, mención, ayuda pública, tolerancia social e inacción de la ley hacia cualquier organización, asociación, empresa o individuo que fomente los discursos de odio». Palabras, incluidas en el manifiesto leído bajo un sol de justicia y ante una bandera arcoíris gigante desplegada por José Bellés en el suelo de la plaza Mayor, que cobran especial sentido en Castellón tras la polémica surgida a raíz de que la Cofradía de Lledó discriminara por estar casado con un homosexual al castellonense Javier Gimeno, vetando su entrada en la junta directiva.

El colectivo castellonense abrió los actos de su día en el salón de plenos del ayuntamiento, donde, ante numeroso público, se reconoció la trayectoria de Josep Castell, colaborador local del Front d’Alliberament Homosexual del País Valencià en la Plana y del Moviment d’Alliberació Gay en los años 70 y 80. Con él se hicieron muchas fotos algunos de los presentes, como el recientemente nombrado diputado de Compromís en la Diputación, Pau Ferrando, o el diputado en Les Corts Fran Ferri. En el mismo escenario agradecieron la implicación de las localidades acogedoras del QueerFest 2016-17 (Almassora, Benicàssim, Castellón y Morella). La exalcaldesa de Almassora Susanna Nicolau, el concejal de Benicàssim Javier Alonso y la vicealcaldesa de Castellón Ali Brancal recibieron el agradecimiento.

Presenció los actos desde primera fila, aunque en un discreto segundo plano, el edil socialista de Castellón José Luis López, que precisamente ayer, en una entrevista a Mediterráneo, reconoció abiertamente su homosexualidad.

Casi medio siglo

Este año, el Día Internacional del Orgullo LGBTBI cumple 48 años. Casi medio siglo de revolución tras los disturbios de 1969 en Stonewall (EEUU), cuando la comunidad de personas lesbianas, gais, transexuales, bisexuales e intersecuales salieron a la calle para protestar por la persecución de los homosexuales. También se conmemoraron los 40 años desde la primera manifestación del Orgullo en el país. Mucho tiempo de lucha «por una sociedad más plural, inclusiva y respetuosa» a la que aún le queda «el gran reto de conseguir la plena igualdad», recalcaron en el manifiesto.

La alcaldesa, Amparo Marco, se dirigió al colectivo, ofreciéndoles «el apoyo del Ayuntamiento» y pidiendo «respeto para todas las personas, independientemente de su orientación sexual».

Desde la UJI, manifestaron a través de un comunicado «el apoyo a la diversidad afectivo-sexual y de género» de la comunidad universitaria. En Burriana, la Vall d’Uixó y Almassora, entre otros municipios, también hicieron actos para celebrar el Día del Orgullo Gay.

emoliner@epmediterraneo.com