Juego de Tronos se ha convertido en un fenómeno mundial desde su estreno en la pantalla en el 2011. Hace más de una semana terminó la séptima temporada y, una vez más, se constató su popularidad a través de la redes sociales. Una parte importante de la serie son los efectos especiales y la animación 3-D que dan vida, entre otros, a los dragones drakaris. En esta tarea participan Santi Bono Plaza y Laura Porcar López. El vila-realense de 30 años y la joven castellonense, de 27, se conocieron estudiando Diseño Gráfico en la Escola d’Art i Superior de Disseny de Castellón y, actualmente, integran el equipo técnico de la cadena estadounidense HBO.

Del ordenador a la pantalla

Santi desarrolla «todo tipo de efectos especiales como el fuego, la nieve, el agua o, incluso, las destrucciones». Laura se dedica «a la animación de personajes creados por ordenador». «Le doy vida a un modelo en tres dimensiones --explicó--, como los caminantes blancos, pero también todo tipo de criaturas, que en Juego de Tronos no son pocas».

Por lo general, invierten unas siete horas diarias delante de los monitores. Se trata de un trabajo en equipo y, aunque tienen horarios flexibles, se han de ajustar a las exigencias de producción. Por ello, en alguna ocasión, la jornada laboral se ha alargado, pero, normalmente, suele ocurrir «cuando se acerca la fecha de estreno», matiza Laura.

No son los únicos españoles, señalan, aduciendo que su fase del trabajo se ha desarrollado en Madrid, en concreto, en la empresa nacional El Ranchito, que cuenta con varios premios Goya y que ha colaborado en películas como Un monstruo viene a verme Un monstruo viene a vermeo Lo imposible. Tanto Santi como Laura constatan que «hay mucho talento en nuestro país». Reconocen que son fans de la serie, y lamentan no haber podido coincidir con ninguno de los actores ni con el autor, George R.R. Martin.

3-D pero sin acción real

Juego de Tronos ha supuesto una oportunidad para ambos que jamás se hubieran imaginado. Sin embargo, solo es una de las iniciativas en las que están implicados, pues también colaboran en otros proyectos, algunos de ellos, centrados plenamente «en la animación y sin acción real». De hecho, siguen buscando nuevos retos, para crecer como artistas. Ellos lo tienen claro: «Cuando persigues tus ilusiones y trabajas duro, todo va llegando poco a poco».