La Vilavella posee uno de los conjuntos de patrimonio bélico de la guerra civil española más importante del territorio nacional. Si en la provincia de Castellón hay un municipio donde este tipo de restos se mantienen prácticamente intactos, es esta localidad de la Plana Baixa. Una característica que lo hace aún más interesante es el hecho de haber pertenecido a los dos bandos que participaron en la contienda.

Para entenderlo hay que remontarse a la primavera de 1938. Por entonces, después de la ofensiva de Aragón y la llegada del ejército nacional a la costa por Vinaròs, este se dirigiría al sur ocupando tanto la costa como el interior de la provincia en un avance sin freno. Las montañas de la Mallá, la Selleta o Santa Bàrbara, del término de la Vilavella limítrofes al sur con Nules y la Vall d’Uixó, quedaron defendidas por la 75 Brigada Mixta (a la que se agregaron dos batallones procedentes de la 128), que durante varias semanas estuvo defendiendo y fortificando el emplazamiento hasta el 7 de julio, en que las tropas franquistas de la 55 División tomarían la localidad. Por todo ello, la Vilavella quedó configurada tanto como la primera línea defensiva del ejército de la República como la última línea ofensiva de avance de los soldados franquistas en esta zona.

El coordinador del proyecto, el arqueólogo José Francisco Albelda, explica que “todo este patrimonio está formado por una gran cantidad de sistemas de fortificación ofensivas y defensivas, que muestran las distintas tipologías de elementos bélicos utilizados en la guerra civil, desde trincheras y fortines o nidos de ametralladoras, hasta parapetos, refugios, campamentos militares o puestos de observación”.

Con el objetivo de poner en valor la zona, se desarrollará en octubre y noviembre el proyecto La Vilavella. Camins de la Memòria, promovido por el Ayuntamiento. Desarrollarán diversas iniciativas, empezando por una excavación arqueológica en la Muntanya de Santa Bàrbara, con la limpieza de dos tramos de trincheras y sendos nidos de ametralladoras, siendo uno de ellos de especial importancia testimonial por su situación estratégica dominando una vista de toda la Plana hasta Valencia.

Una vez limpios, se procederá a su puesta en valor mediante el realzado de las trincheras y colocación de sacos terreros. Además, se señalizará mediante postes de orientación una ruta de la guerra. Por último, “el trabajo se completará con folletos que expliquen el paisaje bélico recuperado”, añade Albelda. El proyecto contempla realizar visitas guiadas con colegios. H