Castellón es una provincia solidaria y cada vez más concienciada sobre las desigualdades. La subdirectora nacional de Oxfam, Pilar Orenes, ha visitado la capital con motivo del décimo aniversario de la oenegé y así ha podido comprobarlo. Orenes ha aprovechado también para reunirse con la vicepresidenta de la Generalitat, Mónica Oltra, y representantes de la política municipal y ha elogiado los pasos dados por su entidad en sus diez años de historia provincial.
-¿Cómo valora la implicación de la sociedad castellonense en los proyectos de ayuda al desarrollo?
--En diez años hemos avanzado mucho en sensibilización, junto a todo el equipo de voluntarios. Sin embargo, aún falta bastante por hacer y confío en el equipo humano que tenemos para seguir construyendo un futuro sin pobreza.
-Su entidad lleva a cabo charlas en colegios de Castellón, campañas de concienciación, recogida de firmas, mercadillos y actividades recaudatorias. ¿Qué iniciativas destacaría de esta década de la oenegé en la provincia?
--Resumir una década de trabajo es difícil, pero destaco la muestra de arte en favor de los refugiados en la Dávalos Flet- cher, tanto la implicación de los artistas que cedieron obras, como la de los colaboradores. La participación en las iniciativas en Castellón es siempre muy alta. La UJI ostenta el título de universidad por el comercio justo desde 2013 y los ayuntamientos ya eligen nuestros productos de comercio justo para las pausas-café en muchos eventos.
-¿Cuentan con suficientes voluntarios para llevar a cabo tantas actividades?
--Algunas veces nos resulta difícil llegar a todo, pero contamos con la buena disposición de los voluntarios. Siempre buscamos personas que quieran colaborar en sus ratos libres. Pueden informarse en la tienda o en la web www.oxfamintermon.org.
-En la actualidad tienen 790 socios en la provincia, pero la gran mayoría de ellos (639) son de la capital. ¿A qué se debe ese déficit en el resto de municipios? ¿Van a implementar nuevas acciones para darse a conocer?
--Tener la tienda en Castellón hace que la gente esté más vinculada a la capital. Aunque nos encantaría llegar a todo el territorio, a veces, nos faltan manos para ello. Aun así, este año hemos hecho actividades diversas también en Vila-real, Borriol y Aín.
-El proyecto educativo Conectando Mundos es muy reconocido a nivel nacional. ¿Cuántos alumnos y centros de la provincia participan?
--En Castellón hay 31 centros y 1.164 alumnos que realizaron el pasado curso este interesante proyecto. Este año trabajaremos la promoción de una cultura de paz y de no violencia, que es fundamental para educar en valores.
-¿Existe un cambio en los hábitos de consumo de comercio justo en Castellón? ¿Qué razones puede dar a la ciudadanía para comprar estos productos?
--En nuestra tienda de Castellón, dentro de Babel, sensibilizamos al público sobre el comercio justo como herramienta de reducción de la pobreza. En el 2016 las ventas en España los 40 millones de euros, pero el consumo anual por habitante en nuestro país es 16 veces menor que la media europea. Es un modo de poner por delante los intereses de las personas y el medio ambiente.
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