La sede de la facultad de Ciencias de la Salud de la Universitat Jaume I (UJI), en su fase 1, ha cosechado un valioso reconocimiento en la bienal de Construcción Sostenible que la Junta de Castilla y León ha organizado y al que aspiraban en esta ocasión un total de 107 candidaturas. El accésit conseguido por el flamante edificio del campus castellonense --en la categoría de tipología de equipamiento-- supone un espaldarazo a la Oficina Técnica de Obras y Proyectos de la UJI y a los valores de sostenibilidad con los que viene trabajando.

A estos premios, que ya van por su sexta edición y que cuentan con la colaboración del Instituto de la Construcción castellanoleonés, se presentaban 39 aspirantes de esta comunidad autónoma y otros 71 del resto de España. Se trata de todo un referente nacional en el sector, con propuestas arquitectónicas que tienen como denominador común la incorporación de criterios respetuosos con el desarrollo sostenible y el medio ambiente. El inmueble ubicado en el campus del Riu Sec quedó seleccionado dentro del grupo de 19 finalistas y como única representante de toda la Comunitat Valenciana.

La Facultad de Ciencias de la Salud de la UJI, en su fase 1, ya cuenta con la certificación, a cargo de la Green Building Council España (GBCe), como edificio verde, lo que la ha llevado a obtener cuatro hojas verdes de un máximo de cinco. Este baremo contempla 6 niveles de certificación, que van de 0 a 5 hojas verdes. A mayor cantidad de hojas (el símbolo es un árbol) se muestra un mayor compromiso con el medio ambiente, lo que da fe del buen posicionamiento que tiene en la actualidad la facultad de Medicina de la Jaume I.

El diseño de este inmueble se basa en la sostenibilidad y la eficiencia energética, una de las premisas necesarias para aspirar a los galardones organizados por la Consejería de Fomento y Medio Ambiente y el Instituto de la Construcción de Castilla y León.

Los Premios de Construcción Sostenible tienen como objetivo principal distinguir aquellos aspectos relevantes e innovadores en el tratamiento de materiales y diseños constructivos que permitan demostrar el potencial de la arquitectura y edificación «en la materialización del concepto de economía circular», según informaron ayer desde la UJI, en el que se destaca la necesidad de que estas obras puedan llegar a ser referentes y ejemplo de sostenibilidad para el resto del sector inmobiliario.

Alta participación

El elevado número de participantes en esta edición ha servido para constatar el interés, cada día mayor, por incorporar propuestas ambientales en las edificaciones, pese al fuerte impacto que ha supuesto la crisis en la construcción. En sus seis ediciones, a estos premios han concurrido 500 participantes, de los que 80 han sido galardonados.

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