Hermanos y hermanas concejales electos: A excepción de unos pocos ayuntamientos en los que el resultado de las pasadas elecciones municipales ha dado como resultado mayorías absolutas (felicidades, por algo será), la mayoría de los ayuntamientos se van a componer de una amalgama de partidos que obligarán a pactar entre dos o más fuerzas políticas.

Tranquilos, no pasa nada. Ya sé que eso de llegar a acuerdos con otros no está muy en nuestro ADN y que estamos aprendiendo a base de que los electores os estamos obligando a ello. El procedimiento más fácil, dejando aparte las incompatibilidades personales que podáis tener con el de la otra formación política, sería que pongáis vuestro programa electoral en una hoja Excel y lo comparéis con el de los partidos que han salido representados. Casi seguro que habrá un porcentaje de coincidencias del 20% al 80%. Si no os dejáis influir por la animadversión de toda la vida que le tenéis a ese sujeto o sujeta que lidera el otro partido, veréis que tenéis mucho adelantado.

Luego están las cosas razonables que proponen unos y otros, aunque vosotros no lo hubierais pensado antes. Digámosle que eso puede ser un 10%-15%.

Con eso solo ya tienes un programa de gobierno que es lo que os debería importar.

Hecho esto sabréis donde están las afinidades mayores y solo queda pactar quién será el alcalde o alcaldesa, por cuanto tiempo, y quien será el edil de urbanismo y el de hacienda.

Si fueran matemáticas la cosa sería sencilla. Pero vosotros sabéis que aquí juegan más variables. Ánimo.

*Abogado. Urbanista