Muchos paisanos, sobre todo terminadas las fiestas de la Magdalena, me hicieron notar el sistema de reconstrucción de las murallas del Castell Vell, que les parecía un tanto insólito, dado que lo calificaban de moderno al confundirlo con un sistema de hormigonado. Precisamente para poner las cosas en su sitio, porque, sin duda los comentarios han debido llegar a los arqueólogos y directores de las obras de reconstrucción, se ha montado una exposición en el sótano junto a la sección de Etnología, del Museo de Bellas Artes de Castellón, dedicada de un modo monográfico al Castell Vell que tiene un significativo interés pedagógico, pese a que no sea en exceso espectacular.
En la muestra, junto a un muy bien planteado vídeo explicativo, hay una serie de paneles informativos que identifican las distintas épocas de la construcción de la fortaleza, así como el proceso de restauración de sus partes. Es muy significativa la explicación del sistema de encofrado con tapial calicostrado, del periodo islámicos de los siglos X al XIII, clarificada con un maderamen (tabut) corpóreo, en cuyo interior se echa la tierra, las piedras y el yeso. De esta manera el visitante puede ver, de un modo real, la forma de trabajar de nuestros antepasados islámicos, que es la misma que se está siguiendo para devolverle, en nuestros días, la entidad a las paredes externas del baluarte.
La exposición se completa con una selección de objetos arqueológicos hallados en las excavaciones del cerro de la Magdalena, que ponen de manifiesto el nivel de vida de los islámicos de la Plana. En verdad es una muestra que todo paisano que quiera conocer sus orígenes, debe visitar. H
