Roberto Bautista y Ana Bodí ya son marido y mujer. La pareja se casó ayer en una ceremonia civil emocionante y de carácter privado que se celebró en el Mas de Lucía, un enclave rodeado de naranjos situado en Nules. El tenista de Benlloch celebró su enlace pocos días después de ganar la Copa Davis y del fallecimiento de su padre. Sin duda, estas últimas han sido jornadas de emociones encontradas para el número 9 de la ATP, quien ha dado ejemplo de una gran fortaleza.
A pesar de las ausencias, ambos se rodearon de su familia y amigos para sellar su amor, tras cuatro años de relación sentimental. Ana Bodí ha sido el gran apoyo de Bautista, tanto en los malos como en los buenos momentos. Con un vestido precioso de inspiración romántica y cuello barco con motivos florales bordados, cintura entallada, manga larga y una gran capa que hacía la función de cola, la burrianense estaba radiante.
Completó su estilismo con una coleta burbuja que recogía su larga melena, unos pendientes largos de perlas y un ramo de flores otoñales, que recogió con una cinta de terciopelo azul, cumpliendo la tradición de que ese color debe acompañar a toda novia en su día. Por su parte, Bautista se decantó por un traje azul con chaleco y corbata a juego.
Según informa la revista Hola, el enlace contó con la presencia 400 invitados, entre los que destacan familiares y amigos de los contrayentes así como el tenista Pablo Carreño, compañero de Roberto en la Copa Davis.
Los momentos para el recuerdo enmarcaron la jornada. Uno de ellos se produjo cuando Ana entró del brazo de su padre, Miguel Ángel Bodí, un conocido promotor inmobiliario de Burriana. Violines, guitarras españolas y voz en directo fue la banda sonora que amenizó la ceremonia.
En recuerdo de su padre
«Me caso el sábado porque no tengo más fechas. Ana me ha dicho si quiero cambiarlo todo pero quiero seguir adelante. Yo le dije a mi padre que el mejor regalo de boda era que estuviera con nosotros ese día, pero en la situación en que estaba lo mejor es que esté ya descansando, explicaba Bautista esta misma semana en una entrevista que le realizado en una emisora de radio. Fue allí donde dedicó unas sentidas palabras a su ya mujer, quien también fue su gran apoyo cuando el pasado año fallecía repentinamente su madre. «Tengo la suerte de tener a Ana muy cerca, me ha ayudado muchísimo. Ha sido todo muy difícil», aseguró el tenista.
Roberto y Ana no harán luna de miel. El flamante campeón de la Copa Davis se preparará en casa, cara a coger fuerzas, para el inicio de la temporada en Australia. Donde tiene una cita es este martes en el programa El Hormiguero El Hormiguerode Pablo Motos, donde será el invitado de la noche. Muchas felicidades a los recién casados.
