La colonia islámica en Vila-real está muy arraigada. Cerca de un millar son los habitantes que procesan dicha religión en la localidad de la Plana Baixa, procedentes de países como Argelia, Marruecos, Libya, Syria, Senegal o Pakistán. Fieles que con los años se han integrado perfectamente en la sociedad vila-realense y que durante el estado de Alarma por el coronavirus se han implicado más si cabe con distintas causas sociales.

Además, este colectivo ha sido pionero cuando desde primeros de semana abrió para sus usuarios su mezquita, la Mezquita Al Rahma -ubicada en el carrer Santa Bàrbara--, la primera en la provincia que se ha desconfinado, desinfectándose y adaptándose a todo el protocolo de medidas sanitarios y de seguridad contra el covid-19.

El tempo que lidera el imán argelino Mahdi Cherifi ha abierto sus puertas desde el inicio de la Fase 1 del confinamiento solo para las cinco oraciones del día, estableciendo “una normas y medidas a para cumplir con los protocolos, guardar la distancia de seguridad y evitar contagios”.

Medidas especiales para cumplir la normativa sanitaria y la distancia de seguridad

Uno de los miembros activos de la Asociación Islámica de Vila-real, Youcef Haddallah, ha acompañado a Mediterráneo, abriéndole las puertas de esta pionera mezquita. “Estamos aceptando en el centro islámico durante esta semana a grupos de entre siete y 18 personas como máximo, dependiendo de las diferentes oraciones, e igualmente hemos puesto un aforo total de 25 personas. Aunque por ley podríamos reunir hasta 40 fieles, preferimos no masificar el templo”, reconoce.

Es más, confiesa que debido al estado de Alarma, “se nota mucho que la gente todavía le cuesta venir presencialmente a rezar”.

Al respecto, se desinfecta el centro diariamente, se ha parcelado el espacio para rezar, con metro y medio de distancia de seguridad para evitar contagios, los aseos están cerrados y se prohibido la entrada a menores y personas mayores y/o de riesgo.

Además, cada persona debe traer su alfombrilla para rezar y acudir con mascarilla. “Por si alguien no se trae alguna de estas dos cosas, disponemos de 200 mascarillas quirúrgicas facilitadas por el Ayuntamiento de Vila-real y de un rollo papel gigante para aquel que no tenga alfombra”, analiza.

“Así es fácil de controlar la situación porque casi son las personas que acuden a la mezquita son gente madura”, añade.

Primer Rezo Sagrado del Viernes presencial durante la pandemia

Como gran novedad, este mismo viernes se ha podido realizar ya de forma presencial la ceremonia del Rezo Sagrado del Viernes, el conocido como ‘Djoumoaa’, dirigido por el imán Mahdi Cherifi, siendo el día grande del mundo islámico de la semana.

Haddallah explica que “durante el confinamiento, el imán hacía esta ceremonia a través de su cuenta de Facebook, por la cual se sigue emitiendo en directo aunque ya se pueda acudir presencialmente, puesto que el aforo sigue siendo reducido y mucha gente todavía no puede o no se arriesga a venir a la mezquita”.

Un paso más hacia la normalidad que la colonia islámica de Vila-real está poniendo en práctica para conseguir que sus fieles “vayan poco a poco acudiendo al templo”.

La Asociación Islámica de Vila-real regala 6.000 mascarilllas y 2.000 guantes al Centro Médico Cariñena y a la Policía

Pero ahí no queda la cosa. Tal es la implicación social de este colectivo que también este viernes, en la sede de la Jefatura de Policía de Vila-real, se ha realizado un acto en el que han estado presentes representantes del Ajuntament de Vila-real, entre ellos la concejala de Sanitat, Silvia Gómez, y la edila de Tradiciones y Seguridad Ciudadana, Noelia Samblás, así como miembros de la Policía Local y de la Policía Nacional. En el mismo se ha procedido a la entrega, por parte de la Asociación Islámica de Vila-real, de 6.000 mascarillas quirúrgicas y 2.000 guantes para repartir entre el Centro de Salud Cariñena de Vila-real (4.000 mascarillas y 2.000 guantes) y los dos citados cuerpos policiales (2.000 mascarillas).

Tras ello, se ha realizado una degustación de pasteles y té tradicionales de Argelia. “Hemos querido contribuir con profesionales que están en primera línea, como sanitarios y agentes de policía, por eso hemos realizado esta donación, en coordinación con el Ajuntament de Vila-real”, explica Youcef Haddallah.

Sin duda, otro gran gesto solidario de la comunidad islámica de Vila-real para combatir el coronavirus, cada vez más insertada dentro del día a día de la localidad de la Plana Baixa.