El confinamiento no va a parar el reto solidario del atleta vinarocense Juanma Fábrega. El deportista, que vive en Burriana, corrió un maratón (42 kilómetros) desde una cinta en el sótano de su casa animado por toda su familia, que pudo verse íntegramente y en directo desde su Facebook Live. Lo hizo para cumplir el desafío que se propuso a principios de año de correr 12 maratones en 12 meses, con el objetivo de recaudar fondos para el centro de desarrollo infantil de Vinaròs Creixem, asociación de la cual es socio.

La carrera que realizó confinado el domingo hubiera tenido que completarla en Zaragoza, pero lógicamente no pudo hacerlo debido al estado de alarma. El reto de Fábrega, atleta independiente, no es menor, ya que serán más de 500 kilómetros los que deberá recorrer a lo largo del año.

Antes de esta última prueba, este deportista ya había hecho lo propio en València, Murcia y Castelló (la de Barcelona se suspendió); y los próximos maratones que tiene marcado en el calendario son Vitoria (10 de mayo), Estocolmo (30 de mayo), Jaén (5 de julio), Reikiavik (22 de agosto), Berlín (25 de septiembre), Bilbao (24 de octubre) y San Sebastián (29 de noviembre). «No sabemos aún qué pasará, pero si no se pueden hacer, no descarto correrlos también en casa», indica Fábrega.

El atleta cuenta que fue un amigo quien le alentó a asumir el reto. «La idea era realizar estos maratones los dos juntos, pero al final se echó atrás y decidí hacerlo solo, aunque no sabía cómo. Y cuando conocí lo que hacía la asociación Creixem entendí que esta era la manera de realizarlo para darle un sentido al reto», explica este vinarocense, quien lleva 10 años corriendo maratones y cree que labor que realiza este colectivo social es «impresionante» para los niños de la comarca. «Cuando vi su proyecto, lo tuve muy claro», añade.

Más duro que de costumbre

Pese a ser un avezado corredor, cuenta que sufrió mucho para completar los 42 kilómetros al estar encerrado, disponer solo de una ventana en el sótano y no correr el aire: «Esto sumado a los nervios y la situación me hicieron sudar muchísimo».

En las tres últimas semanas, se había preparado para completar este recorrido en la cinta. «Para un maratón hay que tener fortaleza mental y física, sobre todo mental», explica.

El presidente de Creixem, Pedro García, alaba el reto de Fábrega. «Iniciativas como esta nos hacen falta, porque en el centro tratamos con niños con diversidad funcional y recaudar fondos es lo que nos ayuda a seguir adelante», concluye.