Los trabajadores de Ryanair ganan el pulso a la compañía. La Audiencia Nacional ha declarado nulo el despido colectivo aplicado por la aerolínea 'low cost' a 224 trabajadores de sus bases de Tenerife, Lanzarote, Gran Canaria y Girona. Los tripulantes de cabina y pilotos de la aerolínea deben ser readmitidos "de forma inmediata", según ha informado el sindicato USO.

El 16 de julio la aerolínea irlandesa anunció el posible cierre de bases y recortes de empleo en toda Europa por el retraso en las entregas de la aeronave de Boeing. El 6 de agosto la 'low cost' enviaba un comunicado a los representantes de los tripulantes de cabina emplazándoles a tratar al día siguiente el impacto que estos retrasos tendrían en las bases españolas y el 7 de agosto hacía 'oficial' que la consecuencia era el cierre de Las Palmas, Tenerife, Lanzarote, así como el "riesgo" de clausura de Girona. Los tripulantes y pilotos de la aerolínea la demandaron ante la Audiencia Nacional por chantaje en la base catalana y actuar de mala fe en el procedimiento de consultas del ere. El tribunal, les ha dado la razón.

Pocos días antes del estado de alarma, el 10 de marzo se celebró la vista oral del juicio en la que la compañía se desdijo del motivo inicial del cierre de bases -- aviones 737 Max de Boeing al señalar que la clausura se debía únicamente a criterios de baja demanda. La resolución del tribunal ha sido readmitir a los trabajadores "en las mismas condiciones de trabajo en que venían desempeñando sus servicios antes del despido colectivo y con abono inmediato de los salarios dejados de percibir desde la extinción del contrato".

"La empresa no quiso abordar un período de consultas conforme al artículo 51.2 del Estatuto de los Trabajadores. Se aprecia mala fe, fraude, coacción y abuso de derecho en el proceder patronal", explica el secretario general de USO en Ryanair y tripulante de Tenerife Sur, Gustavo Silva, sobre la resolución de la Audiencia Nacional. "Ya no somos los trabajadores los que tachamos de ilegales a Ryanair, la propia Audiencia Nacional es durísima en su sentencia con una empresa que siempre se ha valido de coacciones y amenazas a su plantilla y que ha desdeñado las leyes y todas las autoridades españolas", agrega.