El Ayuntamiento de Vila-real contrata los servicios de una empresa local especializada para desinfectar las calles y, así, evitar posibles focos de contagio. La compañía vila-realense Stoplagas, que comenzó ayer a fumigar en el casco urbano, es la única autorizada por la Generalitat para realizar este tipo de actuaciones en la ciudad, que requieren de productos específicos y protocolos especiales de trabajo para garantizar la seguridad y la efectividad de los tratamientos.

Esta empresa completará los trabajos que acomete estos días la UME. Así, Stoplagas priorizará los espacios de paso o concentración de personas como el exterior de establecimientos que mantienen su actividad durante el estado de alarma, y efectuará las labores fuera del horario comercial para no generar molestias. «Los servicios de esta compañía nos permitirán cubrir más puntos del casco urbano», explicó el alcalde, José Benlloch.

El Ayuntamiento también ha contactado ya con los agricultores que han puesto a disposición de la administración local su maquinaria y su colaboración para llevar a cabo tareas de desinfección. La UME formará a los voluntarios que en estos días puedan ser necesarios para colaborar en estas tareas y que estarán coordinados por la empresa, en caso de que requieran su trabajo.

50 inscritos en el primer día del registro de voluntariado

Después de ser aprobado el martes en la junta de gobierno local, el registro de voluntariado municipal ha alcanzado ya en apenas un día las 50 inscripciones. Monitores de tiempo libre, profesores o incluso personal sanitario son algunos de los perfiles que han mostrado en esta primera jornada su disposición a colaborar, cada uno desde su propio ámbito, para hacer más llevadera la cuarentena, en particular a aquellos colectivos más vulnerables. «Podemos estar profundamente orgullosos de nuestra sociedad civil y su disposición, siempre, a colaborar en todo lo que esté en sus manos», destacó el munícipe.