El Ayuntamiento de Torreblanca aprobó este viernes por unanimidad en una sesión plenaria extraordinaria un plan con una dotación presupuestaria de 750.000 euros destinado a reactivar la economía en el municipio y paliar los efectos que ha provocado la crisis del coronavirus.

Así lo puso en valor la alcaldesa, la socialista Josefa Tena, que defendió que, en las actuales circunstancias excepcionales, «la política económica debe estar orientada a proteger el empleo, ayudar a los más vulnerables y mantener el tejido productivo».

La estrategia se distribuye en cuatro grandes líneas de actuación. La primera permitirá crear un plan de empleo dirigido a la contratación de personas que estén en el paro, además de una nueva línea de subvenciones para los comercios y autónomos locales que hayan sufrido una reducción drástica de los ingresos. Ambas medidas suman 210.000 euros de consignación.

En segundo lugar, incluyen 130.000 euros para la protección social de las familias y los colectivos vulnerables. Las ayudas se articulan en servicios como la atención domiciliaria, el reparto de menús diarios a domicilio a mayores y la compra de alimentos.

Impuestos

El plan también contempla, dentro del capítulo dedicado a la reducción de las cargas fiscales, una reducción del gravamen del IBI urbano para el 2021 valorada en alrededor de 200.000 euros. Por otra parte, han aplicado ya medidas como la ampliación de las terrazas, su exención de pago durante el 2020 o el aplazamiento de los impuestos.

Por último, parte de la estrategia se destina a medidas de protección, como la adquisición de mascarillas, la desinfección o el refuerzo con 40.000 euros del fondo de contingencia local.

«Son los ayuntamientos, como administración más próxima, los que tienen el deber de defender los intereses de sus vecinos», concluyó la primera edila. H