El Ayuntamiento de Vila-real activa un gabinete formado por ocho técnicos municipales para asesorar al Gobierno local y dar respuesta a las acciones y gestiones encaminadas a avanzar en la desescalada y el paso hacia la nueva normalidad tras la pandemia. El alcalde, José Benlloch, detalla en concreto que este órgano, que celebró su primera reunión el pasado viernes, tiene como principal función hacer posible el «equilibrio» entre «el renacimiento y la necesidad de dinamizar cuanto antes la ciudad con la imprescindible prudencia y garantía de seguridad sanitaria en todas las acciones que se lleven a cabo en este proceso».

El munícipe recuerda que se comprometieron a afrontar esta desescalada desde «la responsabilidad y siempre primando la salud de las personas», por lo que considera que la mejor manera es que exista un criterio técnico que asesore en esta reactivación de Vila-real, «tanto desde el punto de vista de la reapertura de instalaciones municipales como de las iniciativas enfocadas a la dinamización económica y social».

Informes

Ante cada propuesta, la decisión final estará en manos del equipo de gobierno, pero atendiendo a los informes y parámetros fijados por este órgano.

El ente ha solicitado a todas las concejalías que elaboren planes detallados sobre la llegada a la nueva realidad, siempre teniendo en cuenta que estos planes y las medidas a implantar deben ser «flexibles», dado que la normativa que fijan las autoridades competentes en materia sanitaria «puede ir variando según las necesidades que se vayan detectando por la evolución de la pandemia», explica Benlloch.

El gabinete está coordinado por la jefa del Gabinete de Alcaldía, Edurne Zubiría, e integrado además por: Simón García Petit, coordinador-asesor de Alcaldía en Urbanismo; David Montés, jefe del negociado de Sanidad; Pilar López, jefa de Servicios Sociales; Estela Bellés, operaria de Alcaldía; Carlos Martín, técnico auxiliar de Relaciones Institucionales; Joaquín Capilla, técnico en Prevención de Riesgos Laborales; y José Ramón Cantavella, jefe del Servei Municipal d’Esports.

Miércoles y sábados

Camino hacia esa renovada normalidad, una cita que volvió este miércoles a la ciudad es el mercado ambulante de ropa y complementos, que se celebrará los miércoles y sábados en, de forma provisional, la Ciutat Esportiva Municipal (CEM). La muestra comercial de los sábados contará con 106 paradas y la de los miércoles, como ayer, con 75.

El concejal de Economía, Xus Madrigal, valora como «muy positivo» el balance del mercado en su primer día en esa nueva ubicación, ya que conjuga los intereses de vendedores y clientes, y permite celebrar la cita «con las medidas de seguridad establecidas por las autoridades sanitarias y, al mismo tiempo, con unas condiciones de venta más rentables para los comerciantes».