El beneficio neto de las subvenciones comunitarias del fondo de reconstrucción de 750.000 millones de euros que acordaron en julio los líderes europeos para hacer frente a la crisis del covid-19 alcanzará aproximadamente los 42.000 millones o el 3,4% del producto interior bruto (PIB) español. Un informe publicado este miércoles por el Banco Central Europeo (BCE). titulado 'Las implicaciones fiscales de fondo de recuperación de la UE', concreta por primera vez lo que cada estado percibirá de forma neta una vez realizado el saldo de transferencias y créditos.

En bruto, España recibirá 72.700 millones de euros en transferencias, además de otros 67.300 millones en créditos a devolver. Pero al final, el saldo neto descontadas las devoluciones de los préstamos --con los intereses-- alcanzará aproximadamente los 42.000 millones mencionados. "Grecia será el mayor beneficiario neto de las ayudas en relación con su PIB (en la eurozona), pero España e Italia, que se espera que estén entre los estados más gravemente afectados tanto en términos de muertes como de impacto económico, recibirán también un apoyo fiscal considerable", destaca el artículo del BCE.

El BCE agrega que paquete de recuperación de la UE representa un hito importante en la integración de la política económica europea. El 21 de julio del 2020, el Consejo Europeo acordó un instrumento de recuperación temporal excepcional conocido como 'Next Generation EU' (Próxima Generación UE). Junto con el Marco Financiero Plurianual (MFP) regular, ese programa garantizará una respuesta fiscal europea coordinada a las consecuencias económicas de la pandemia del coronavirus.

CAPTACIÓN DE RECURSOS

La Comisión Europea ha sido autorizada a recaudar hasta 750 mil millones de euros en los mercados de capitales en nombre de la Unión Europea. Los fondos pueden utilizarse para proporcionar préstamos de hasta 360 000 millones de euros y subvenciones de hasta 390 000 millones de euros. Estos se desembolsarán hasta finales de 2026 y se reembolsarán a más tardar el 31 de diciembre del 2058. La emisión del NGEU aumentará la deuda pendiente de la Unión en un múltiplo de alrededor de 15, lo que constituye la mayor emisión denominada en euros a nivel supranacional. Si bien los préstamos serán reembolsados por los estados miembros beneficiarios, el Consejo Europeo acordó reformar el sistema de recursos propios y garantizar que los reembolsos de las subvenciones se cubran con contribuciones basadas en la renta nacional bruta y nuevos recursos propios de la UE.

Además, el organismo con sede en Fráncfort considera que el fondo debería prolongarse en el tiempo: estima que la respuesta europea a la crisis es ambiciosa y acorde con el desafío al que se enfrenta el continente, pero llama a no conformarse y extraer lecciones para la Unión Económica y Monetaria, que todavía carece de un sistema anticrisis supranacional.