Poco entusiasmo. Así se puede definir la reacción de los empresarios turísticos de Castellón ante el plan de impulso al sector que ayer fue presentado por el Gobierno, en una comparecencia encabezada por el presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez. Las medidas suman 4.262 millones, de los que 2.500 corresponden a una línea de avales del Instituto de Crédito Oficial (ICO). Y es precisamente ese aspecto el que menos ha convencido, al considerar que obliga a seguir endeudándose ante una temporada de verano inédita y con escasas expectativas tras tres meses y medio de cierre por el confinamiento.

Para el presidente de Ashotur, Carlos Escorihuela, «las ayudas son escasas para un sector de este peso en nuestro país; creo que podrían haberse incluido partidas finalistas y no solo créditos, que son un dinero que al final hay que devolver». En cambio ve más positivo el anuncio de un mecanismo que permita que se pueda otorgar un plazo máximo de 12 meses para aquellas operaciones financieras con garantía hipotecaria, suscritas por autónomos o empresas cuyo inmueble se encuentra afecto a una actividad turística, incluidos alojamientos. «Hay que tener en cuenta que vencen plazos y hay gente que debe hacer frente a estos pagos cuando este año apenas han entrado ingresos», dijo.

Por parte de Altur-Hosbec, su presidente Alexis de Pablo calificó de «maquillaje» las alternativas lanzadas desde el Gobierno. «Son tibias, porque recogen lo que ya estaba previsto, y nos dan a entender que el turismo no es un colectivo prioritario» para los dirigentes estatales.

EMPLEO / Las críticas también han llegado al ámbito laboral, ya que todavía no se ha anunciado si habrá una renovación de los expedientes temporales de empleo (ERTE) para el sector. Los empresarios a nivel nacional reclaman que se mantengan los supuestos de fuerza mayor más allá del 1 de julio, y que se establezca un mecanismo de recuperación progresiva de los asalariados a medida que sea necesario. Los servicios, dentro de los que se incluyen el turismo y la hostelería, son los más afectados por los paros temporales en Castellón, con más de 27.000 personas incluidas.

Otro aspecto a tener en cuenta son las contrataciones temporales. Castellón contó en los anteriores veranos con unos 30.000 empleados, a partes iguales entre fijos y eventuales. Se teme que la caída sobre el 2019 sea drástica.

MÁS IDEAS / El responsable de la asociación de Castelló Ashocas, Álvaro Amores, incidió en que el plan «no incluye más ideas para el fomento de segmentos como la gastronomía ni propuestas que animen a la gente a salir de vacaciones, con el consiguiente retorno para la economía».

Por parte de la Alianza para Excelencia Turística, Exceltur, los 2.500 millones en avales se quedan cortos «ante los 83.000 de pérdidas de actividad» en el conjunto del país, por lo que las medidas «se quedan exiguas». La extrapolación de las pérdidas previstas para el 2020 en el conjunto del país implican que cerca de 2.000 millones se localicen en Castellón. Entre sus sugerencias, estaba la reducción o liberación de impuestos como el IVA.

Las actuaciones del Ejecutivo incluyen 850 millones de euros para «impulsar un modelo turístico basado en la sostenibilidad y la digitalización», expresó Pedro Sánchez. Durante la presentación incidió en la creación de las 21 guías con recomendaciones sanitarias para afrontar con seguridad estos meses, con un coste total de 200.000 euros. Además, Sánchez anunció la creación de un «sello distintivo» para dar seguridad a los establecimientos que se comprometan a seguir estos protocolos.

Por parte de Hosbec en la Comunitat, su secretaria general, Nuria Montes detalló que el plan «desoye todas las recomendaciones de los expertos, las reivindicaciones de empresarios y sindicatos, los criterios de la Unión Europea y todos los mensajes de auxilio de nuestro sector».