La propagación del coronavirus ha supuesto un revés a nivel social, económico y cultural en todo el mundo. También en la provincia, que ha visto cómo la industria azulejera ha cesado su actividad y ha mandado a casa a más de 50.000 trabajadores. Una situación crítica que abre un gran abanico de preguntas sobre el presente y el futuro de la economía mundial. El presidente de la Diputación de Castellón, José Martí, repasa en esta entrevista qué consecuencias podría suponer la pandemia en la economía de Castellón.

--En su primer año al frente de la Diputación de Castellón supongo que nunca se podría haber imaginado una situación como la actual. A título personal, ¿cómo afronta el presidente de la administración provincial la crisis sanitaria internacional?

--La respuesta a esa pregunta casi viene en su periódico. La afronto con filosofía y como un reto. Precisamente en un artículo en Mediterráneo escribo sobre la cuestión. Lo que nos pasa marcará un antes y un después en nuestras vidas. Hay que tener resistencia, cumpliendo el quédate en casa a sabiendas de que somos responsables de evitar más casos de contagio permanenciendo en nuestros hogares. Y después resiliencia, saliendo con mucha fuerza, con más experiencia, un poco más sabios y un poco mejores.

--¿Cuáles son las medidas más relevantes que ha puesto en marcha la Diputación provincial para hacer frente a la pandemia provocada por el covid-19?

--Desde el primer momento no hemos parado. Tomamos medidas rápidas y seguras, como la organización por teletrabajo de casi todo el personal de la administración, llevamos a cabo medidas fiscales en recaudación para retrasar el pago de impuestos en voluntaria y ejecutiva, dispusimos de cinco millones de euros para que los ayuntamientos que no hubieran solicitado el adelanto de la recaudación lo reclamen y puedan hacer las gestiones oportunas para hacer frente a la pandemia, hemos dado ayudas por valor de 5,6 millones de euros del Fondo de Cooperación Municipal que recibirán los municipios durante los próximos días, etc... Y, por supuesto, después de muchas gestiones, que no han sido fáciles, adquirimos material de protección para el personal de los ayuntamientos, que ya se ha empezado a distribuir, acciones de desinfección de los pueblos por parte del parque de bombero, distribución de medicamentos de la mano de protección civil a los enfermos oncológicos… Como ve, no hemos parado y aprovecho para dar las gracias al personal de los servicios técnicos, jurídicos y administrativos de la casa y también a los diputados de las distintas áreas. Su trabajo ha sido excelente y me gustaría ponerlo en valor frente a los ciudadanos.

--¿Podría comentarnos de qué modo se están organizando ustedes con el resto de administraciones, tanto locales como de carácter autonómico? ¿Cuál es su comunicación?

--Yo he descubierto el teletrabajo. Estoy confinado en mi casa, en Sueras, pero las reuniones por videoconferencias (presidente de la Generalitat, conselleries, Subdelegación de Gobierno, diputados, Direccion Territorial de Presidencia, alcaldes, gabinete de presidencia, etc) son constantes y continuadas. Todo lo que hacemos lo gestionamos con la colaboración, por un lado, de la Generalitat valenciana y la Subdelegación de Gobierno y, por otro, con los alcaldes y alcaldesas.

--¿Cómo cree que afecta y afectará el impacto del coronavirus a la economía castellonense? ¿Y anímicamente? ¿Considera que se podrá levantar la industria?

---Por desgracia, creo que afectará muy duramente. Todos los sectores quedarán gravemente afectados y habrá un antes y un después en la economía de Castellón. El parón económico en todo el mundo condicionará a la construcción y por ende a la industria azulejera y a otro de nuestros sectores clave, el turismo, es especialmente sensible a crisis socioeconómicas como la que soportamos. Será duro salir, pero lo haremos y las administraciones públicas estaremos al lado de estos sectores que son clave.

--Entre los 135 municipios de la provincia de Castellón hay algunos muy pequeños, con una baja densidad de población. ¿Cómo resuelven las acciones de prevención dictadas por el Gobierno central en estas localidades que son tan pequeñas?

--Te hablo de Sueras, que puede ser un caso más entre tantos pueblos semejantes. Desde los servicios sociales de la mancomunidad, y con personal de ayuntamiento que se ha prestado voluntariamente, damos servicio a las personas más mayores o personal de riesgo para que no salgan de sus casas. Les llevamos la compra, medicamentos de la farmacia, sacamos la bolsa de basura, etcétera.

Por las redes sociales o haciendo bandos los tenemos informados de todos estos servicios. La información y el ánimo también es muy necesario en estos momentos. Y en nuestro caso, que tuvimos una persona afectada por el virus, que desgraciadamente falleció, el parque de bomberos hizo trabajos de desinfección. Esa es la tónica a seguir.

--¿Qué piensa de las medidas promovidas por el Ejecutivo que preside Pedro Sánchez?

--Desgraciadamente esto es una pandemia universal, nueva y desconocida. Y ahí tenemos el ejemplo de otros países. El Ejecutivo creo que ha hecho lo que debía al actuar a partir de las indicaciones de los expertos médicos y científicos. El confinamiento es una medida dura, pero necesaria. Y las ayudas económicas y sociales que se están arbitrando creo que son muy importantes.

En estos momentos, lo comentaba también en mi artículo, hace más falta que nunca la amistad cívica. El coche está parado, hemos de bajar todos del vehículo y empujar, empujar con más fuerza que nunca y hacia adelante. Después ya hablaremos, utilizando un símil taurino: a toro pasado todos sabemos torear.

--¿Qué mensaje mandaría a los castellonenses que siguen en estos momentos de crisis?

--Me gustaría trasladar un mensaje de fuerza y esperanza. Estamos haciéndolo bien y hay que continuar en este camino. No somos una de las provincias con mayor afectación del virus y hay que seguir en esa dirección. A ver si llegamos al desgraciadamente famoso pico y empezamos a descender el número de contagios.

Esto se superará, en otros tiempos y con menos recursos médicos, la humanidad lo ha superado. Y al superarlo podríamos dar mucha más importancia y valorar en mucha mayor medida las cosas pequeñas que al final son muy grandes, de las que disfrutamos cotidianamente y ahora no tenemos y echamos de menos. ¡Juntos podemos conseguirlo!