El Metro de Madrid clausura desde este sábado 44 vestíbulos y 183 accesos de su red para "minimizar riesgos" entre sus empleados frente al coronavirus, que ya no tendrán que trabajar en estos espacios. Todos los supervisores comerciales mayores de 60 años han dejado de trabajar.

La medida permitirá optimizar recursos y adaptarlos a la nueva situación en tareas de limpieza, vigilancia o mantenimiento. El número de viajeros ha caído un 90% en las últimas semanas, tras la declaración del estado de alarma y las medidas excepcionales aprobadas por las administraciones públicas.

Los criterios que se han tenido en cuenta para el cierre de estos vestíbulos y accesos son que cuenten con un tránsito inferior a 500 viajeros diarios y que los accesos cuenten con una alternativa cercana, explicó el consejero de Transportes, Movilidad e Infraestructuras de la Comunidad de Madrid y presidente de Metro, Ángel Garrido.

"Vamos a mantener abiertos todos los vestíbulos que dan acceso a hospitales cercanos, a intercambiadores o que cuenten con ascensores", precisó Garrido, que detalló las estaciones afectadas.

Son las siguientes: Valdeacederas, Tetuan, Estrecho, Río Rosas, Iglesia, Tirso de Molina, Antón Martín, Estación del Arte, Menéndez Pelayo, Puente de Vallecas, Nueva Numancia y Portazgo, de la línea 1; Retiro, Banco de España y Noviciado (línea 2); Legazpi, Delicias, Embajadores y Argüelles (l3) Bilbao, Goya, Serrano, Velázquez y Lista (línea 4) Canillejas, Ciudad Lineal, El Carmen, Urgel, Vista Alegre y El Capricho (5); Oporto y Conde de Casal (6); Pueblo Nuevo, Islas Filipinas y Valdezarza (7); Núñez de Balboa, Barrio del Pilar, Pío XII, Concha Espina, Cruz del Rayo, Vinateros, Artilleros y Valdebernardo (9) y Alonso Martínez (10). Las líneas 8, 11 y 12 (Metrosur) no tendrán ninguna estación con vestíbulos cerrados.

En todas las estaciones de Metro se está manteniendo siempre una puerta abierta para el acceso y otra para la salida, evitando también que los usuarios tengan que tocar las puertas.