Después de escuchar las demandas del sector de la hostelería, uno de los más golpeados por la crisis, el Ayuntamiento de Onda se compromete a devolver la parte proporcional de la tasa por instalación de mesas y sillas en establecimientos durante el periodo que han estado cerrados por el estado de alarma. Además, permitirá a los bares y restaurantes ampliar las propias terrazas, respetando siempre la convivencia vecinal, sin ningún coste extra.

Así lo anunció ayer la alcaldesa, Carmina Ballester, junto a la edila de Promoción Económica, María Baila, en una reunión telemática que mantuvo con la junta directiva de la asociación de hostelería y turismo local Hosturionda.

Tal como puso en valor la munícipe, estas medidas responden al objetivo de incentivar la economía local tras la alerta sanitaria, ayudando a los empresarios a salir adelante. «La hostelería es uno de los sectores que más está sufriendo las consecuencias de esta crisis sanitaria y es justo ayudarles, por eso estamos trabajando en lo que nos piden para serles lo más útiles posible y conseguir que Onda pronto vuelva a ser ese referente gastronómico y turístico de la provincia», comentó.

Asimismo, el plan de ayudas para autónomos puesto en marcha por el consistorio, con incentivos de 600 euros mensuales para quienes no hayan cesado su actividad y de 200 euros para los que han tenido que parar, ya se está empezando a pagar.