Panamá anunció que desde el próximo domingo suspenderá las llegadas y salidas de vuelos internacionales, en una nueva escalada de las medidas para frenar la expansión del COVID-19 que deja ya 109 contagios en el país, incluido un fallecido.

"A partir del domingo 22 de marzo a las 11:59 p.m. (04:59 GMT del lunes) quedarán suspendidas las llegadas y salidas de todos los vuelos internacionales a nuestro país, por un periodo de 30 días #ProtégetePanamá #UnidosLoHacemos", anunció el presidente panameño, Laurentino Cortizo, a través de su cuenta en Twitter.

Esta medida de suma a la suspensión de los vuelos procedentes de Europa y Asia por 30 días prorrogables desde la medianoche del sábado pasado, y a la prohibición de la entrada de extranjeros vigente desde el lunes.

A quedarse en casa

Panamá, que fue declarada en estado de emergencia el pasado 13 de marzo, mantiene suspendidas las clases, los eventos deportivos y culturales masivos, clausurados los comercios de ocio y desde anoche rige un toque de queda nocturno que prevé algunas excepciones.

"Los que se pueden quedar en casa, quédensen en casa. Los que tenemos que echar pa'lan, vamos a echar pa'lante (...) esta es una guerra (...) la vamos a ganar", afirmó el gobernante.

El representante de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) en Panamá, Gerardo Alfaro, afirmó que el país "se ha venido preparando desde mucho antes de tener el primer contagio y ha venido ordenadamente instalando las acciones que están previstas" para enfrentar la crisis.