El Índice de Precios de Consumo (IPC) subió un 0,3% en abril en relación al mes anterior y recortó siete décimas su tasa interanual, hasta el -0,7%, la primera caída desde agosto del 2016. Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) el IPC interanual encadena tres meses de retrocesos por el abaratamiento de los carburantes y combustibles y de la electricidad y el gasóleo para calefacción. El gasóleo para calefacción bajó el 18,1% y la electricidad cayó el 5,8%. Sin embargo, el efecto del confinamiento de la población ha influido en la captación de datos, que se ha realizado íntegramente por métodos telemáticos. Así, el 30% de los precios han tenido que ser estimados.

Pese a esta irregularidad estadística, se constata que el precio de los alimentos ha aumentado. Los precios de los productos incluidos en el 'grupo especial bienes Covid-19', en el que se figuran los productos de alimentación, bebidas, tabaco, limpieza para el hogar, comida para animales y cuidado personal, aumentaron el 1,1% en abril respecto al mes anterior.

Alimentos frescos

Dentro de este grupo, los alimentos frescos elevaron sus precios un 2,6%, destacando los aumentos de las legumbres y hortalizas frescas, que subieron un 10,4% respecto a marzo; el marisco fresco (+3,5%), el pescado fresco (+2,7%) y las patatas (+2,6%). El mayor descenso se lo anotó la carne de ovino (-2,1%).

Los alimentos envasados, por su parte, incrementaron sus precios un 0,7% en tasa mensual, debido fundamentalmente a la subida de las pizzas (+3,6%), y las pastas alimenticias y los zumos de frutas (+2,5%).

Por su parte, los precios del 'grupo especial servicios covid-19', en el que figuran los servicios de alquiler de vivienda y garaje, la distribución de agua, alcantarillado, recogida de basuras, gastos comunitarios, electricidad, gas, gasóleo para calefacción, telefonía, música y televisión en 'streaming', seguros, comisiones bancarias y servicios funerarios, disminuyeron un 1,5% en abril respecto a marzo.