El president de la Generalitat, Ximo Puig, convocó ayer a los ayuntamientos y las diputaciones a sumarse al Acuerdo Valenciano por la Reconstrucción de la Comunitat y a cooperar con sus aportaciones y experiencia en el diseño de una hoja de ruta que sirva, entre otros aspectos, para relanzar el tejido productivo.

Según Puig, el territorio autonómico es un ejemplo en el cumplimiento de las medidas de confinamiento en el conjunto de España y «ahora será bueno también que la sociedad valenciana sea un ejemplo de saber entendernos». El titular de la Generalitat trasladó su «agradecimiento» y «reconocimiento» por el trabajo que realizan estas administraciones en primera línea y añadió que tendrán un «papel relevante» en la fase de recuperación.

El presidente de la Diputación de Castellón, José Martí, destacó sobre el pacto la determinación de su equipo de gobierno «para trabajar todos en una en una misma dirección, que es lo que demanda claramente la ciudadanía. Hay que rebajar tensiones y salir adelante con humildad y lealtad institucional».

FINANZAS / En su intervención, Martí hizo hincapié en la necesidad de que los municipios puedan hacer uso de sus remanentes para destinarlos a medidas para hacer frente a esta pandemia. Por ello, pide que Puig traslade al Gobierno español el permiso de una moratoria de dos años en los efectos de los planes económicos financieros. Según ha confirmado, actualmente, además de la institución provincial, hay 27 ayuntamientos que no podrán hacer uso de todos sus recursos por estar bajo la tutela del Ministerio de Hacienda. Los municipios deben de disponer de «los máximos recursos para poder iniciar la reconstrucción de la economía y las políticas sociales», señaló.

Por otro lado, la presidenta regional del PP, Isabel Bonig, pide al jefe del Consell, Ximo Puig, que ponga «fecha, hora y lugar para ponernos a trabajar» para trazar el pacto autonómico de reconstrucción tras la pandemia. «Hasta ahora ha mostrado buenas formas, pero necesitamos concreción», dijo. Añadió que la Comunitat «no puede esperar para una hoja de ruta ante la desescalada. Autónomos, pymes, trabajadores, proveedores y sectores productivos urgen ya las pautas para sacar adelante la economía».