La Federació de Penyes de Bous al Carrer espera que la grave crisis sanitaria provocada por la pandemia de coronavirus no afecte a los actos taurinos que está previsto que se celebren después de mayo y a lo largo del verano en las tres provincias de la Comunitat Valenciana, por lo que de momento mantiene las fechas de los festejos programados a partir del mes de junio.
La actual situación de estado de alarma ya ha provocado la suspensión de la programación de los bous al carrer desde el pasado mes de marzo al próximo de mayo, que en la provincia de Castellón tenía uno de sus puntos álgidos en las fiestas de Sant Pasqual (Vila-real) suspendidas de manera oficial la pasada semana.
La Federació de Penyes de Bous al Carrer de la Comunitat Valenciana ya ha recomendado que los festejos que se han visto afectados por el covid-19 retrasen su posible celebración al último trimestre del año, con la finalidad de no interferir a los que, de momento, mantienen el cartel para los meses de junio, julio, agosto y septiembre y no saturar esas fechas veraniegas ya de por sí muy cargadas de eventos taurinos.
APLAZAMIENTOS
Así, los casi mil festejos que según la Federació han tenido que ser aplazados obligatoriamente por el estado de alarma — desde toro de cuerda, toro embolado, exhibición de vacas, concurso de recortes y toro cerril— deberían esperar a octubre para reprogramar sus fechas. Casi 200 toros cerriles y más de 1.400 reses autóctonas se quedarán en sus puntos de origen al no poder exhibirse en los pueblos de la Comunitat Valenciana durante el periodo de confinamiento decretado por el Gobierno desde el pasado 14 de marzo.
